La Paz.— Bolivia presentó ayer una “protesta formal” a México por un video en el que supuestamente Evo Morales desde su asilo “conspira” contra el gobierno interino de Jeanine Áñez. En el video difundido el miércoles se escucha una voz atribuida a Morales en la que según la cancillería “muestra actividad conspirativa” contra el Ejecutivo provisional boliviano.
“Las manifestaciones y actos efectuados por el señor Evo Morales contravienen su condición de asilado político”, advirtió el Ministerio de Relaciones Exteriores de Bolivia en un comunicado. “Morales incita a la violencia desde México, lo que atenta contra la estabilidad del gobierno constitucional, la paz social y los derechos humanos del pueblo boliviano”.
Bolivia denunció que México desconoce la Declaración sobre el Asilo Territorial de 14 de diciembre de 1967, que establece que los Estados que concedan asilo no deber permitir que los asilados “se dediquen a actividades contrarias a los propósitos y principios de las Naciones Unidas”. El gobierno de Áñez expresó “su profunda molestia” al Ejecutivo de Andrés Manuel López Obrador por “la violación de los principios que rigen la institución de asilo político”. Karen Longaric, quien funge como ministra interina de Relaciones Exteriores de Bolivia, dijo a los medios que la nota de protesta iba a ser entregada a la embajadora de México en La Paz, María Teresa Mercado.
El gobierno provisional de Bolivia anunció el miércoles que presentará una denuncia internacional en contra de Evo Morales por “crímenes de lesa humanidad”, con base en el video donde la persona a la que se identifica como Evo da instrucciones para organizar a cocaleros y resistir en bloqueos de carreteras en contra del gobierno interino de Áñez.
En respuesta, Morales denunció vía Twitter a las nuevas autoridades de Bolivia por “crear un montaje con intención de hacerme un juicio internacional”.
El partido del mandatario renunciante, el Movimiento al Socialismo (MAS), afirmó que Evo no será el candidato de su partido en los próximos comicios generales que el gobierno interino y opositores están intentando coordinar para superar la crisis política. En la Asamblea Legislativa de Bolivia, dos proyectos, uno del gobierno de Áñez y otro del MAS, eran debatidos por senadores y diputados, con el objetivo de convocar a nuevas elecciones en la nación andina y calmar la violencia que ha dejado 32 muertos en el país.
En tanto, miles de simpatizantes de Morales se manifestaron en La Paz para condenar la muerte de cerca de una decena de personas en el operativo policial y militar que desbloqueó el martes la planta de hidrocarburos de Senkata. En la marcha llevaban féretros con los cuerpos de los fallecidos y se desataron choques con la policía.