Ciudad de México/Ammán.— Los mexicanos que fueron atacados ayer en Jordania están en observación, pero estables, señaló el embajador de México en aquella nación, Roberto Rodríguez.
Ellos eran parte de un tour que visitaba las ruinas de Jerash. Estaban reunidos cuando un sujeto comenzó a atacar con su cuchillo.
En entrevista con EL UNIVERSAL, el diplomático mexicano indicó que las autoridades jordanas llevan a cabo la investigación sobre el caso. Aparentemente, indicó, no fue un ataque directo hacia los mexicanos, toda vez que en el grupo un musulmán también resultó herido.
Sin embargo, añadió, las autoridades de Jordania ya llevan a cabo una investigación. Roberto Rodríguez narró que la afectada es una familia de cinco integrantes que se encuentran en Jordania en calidad de turistas. Al parecer, estaban allá desde el 31 de octubre.
Los mexicanos heridos son un matrimonio, identificado por el embajador de Jordania en México, Mohammad Tal, como Jorge Vergara y Mónica Díaz, y la madre de esta última. Junto con ellos se encontraba el papá de Mónica, quien resultó ileso. Mónica tuvo que ser intervenida de manera inmediata en el hospital de Jerash. La operación la realizó el titular de Salud, Saed Haider. A Jorge lo tuvieron que trasladar, en helicóptero, a la ciudad de Ammán. Según sus familiares, habría perdido un pulmón.
La madre de Mónica, cuyo nombre no ha sido revelado, sufrió dos cuchilladas en la espalda. Los tres ya se encuentran en el mismo hospital.
Un video que circula en redes sociales muestra a una mujer que en español pide ayuda mientras se ve a una mujer en el suelo y a un hombre ensangrentado. El agresor fue detenido en el acto. En total, hirió a ocho personas. Además de los tres mexicanos, hay una turista suiza y cuatro ciudadanos jordanos lesionados.
De ellos, dos: el guía y un guardia de seguridad, resultaron lesionados en su intento por desarmar al autor del ataque, identificado por fuentes de los servicios de seguridad jordanos como Mustafá Abouruis, un palestino de 22 años que provendría del campamento de refugiados de Souf, cerca del sitio arqueológico. Se desconocen sus motivaciones.
Zuheir Zreiqat, guía turística que presenció el ataque, explicó a la AFP que ocurrió “después de mediodía, cuando un centenar de turistas extranjeros visitaban el sitio arqueológico de Jaresh, unos 50 kilómetros al norte de Ammán. Un hombre que al parecer ya era buscado por las autoridades, de unos 20 años, con barba, vestido de negro y con un cuchillo en la mano se acercó y empezó a apuñalar a los turistas”, contó.
El embajador mexicano detalló que apenas supo del incidente se trasladó al lugar de los hechos para brindar la protección necesaria. También narró que otros dos turistas mexicanos que iban en el tour son médicos y habrían ayudado a contener las hemorragias de los heridos, lo que quizá les salvó la vida.
Comentó que se ha apoyado a la familia con necesidades básicas como facilitar los medios para que puedan hacer llamadas telefónicas, además de que personal diplomático mexicano permanece en el hospital al tanto de lo que ocurre. Roberto Rodríguez agregó que las autoridades mexicanas recibieron disculpas por parte del gobierno de Jordania. Al hospital incluso llegó, dijo, el jefe de la Corte Real, Yousef Isawi.
En México, el embajador Tal se reunió con familiares de los connacionales heridos, a quienes brindó apoyo, según se informó en el Twi- tter de la representación diplomática jordana. “El señor embajador escuchó las inquietudes de la familia y les proporcionó información fidedigna acerca de la situación de salud de las tres víctimas. “S.E también los ayudó a ponerse en contacto con el Sr. Jorge Vergara, uno de los heridos, a través de la representación consular de México en Jordania” y que él les explicó que está estable.
El canciller mexicano Marcelo Ebrard Casaubon dijo que no se han aclarado las razones del atacante, “si era robo, si es un tipo desequilibrado, pero ya está detenido” y que el rey jordano está pendiente del caso. El traslado de los connacionales afectados a México podría tardar entre dos y tres semanas.