Caracas.— El carpintero José Narváez planeaba abandonar Venezuela y emigrar a la cercana isla caribeña de Aruba antes de fin de año, hasta que el presidente Nicolás Maduro reveló un conjunto de medidas en medio del desmoronamiento de la economía del país.
Ahora Narváez, de 43 años, quiere irse tan rápido como pueda porque cree que el paquete económico es “ilógico” y no le genera confianza. “Esto se va a poner peor”, sostiene.
Ayer entró en circulación el bolívar soberano en Venezuela que resta cinco ceros a la moneda anterior, primera medida del plan económico de Maduro, quien prometió vincular la moneda al petro, la nueva criptomoneda petrolera nacional, algo que expertos dudan que sea efectivo.
“Estoy buscando el pasaje para irme el miércoles como sea”, dijo Narváez. “Por más deseos que tenga de estar en mi país con los míos, tengo que hacer de tripas corazón”.
Maduro, quien sostiene que el país es víctima de una “guerra económica” liderada por Washington que busca sabotear su gobierno a través de sanciones, dice que el uso del petro abolirá la “tiranía” del dólar y llevará a un renacimiento de Venezuela, que tiene las mayores reservas de crudo del mundo.
La nación miembro de la OPEP ha sucumbido ante la escasez de comida, el resurgimiento de enfermedades ya erradicadas y la destrucción de los salarios por la hiperinflación, por lo que miles han decidido dejar el país, la mayoría en largos viajes en bus en busca de un nuevo hogar.
La ONU calcula que al menos 2.3 millones de venezolanos se encuentran ahora en el exterior.
¿Para dónde se va uno? Las medidas económicas puestas en marcha por Maduro, que incluyen una devaluación de la moneda y un incremento de 60 veces el salario mínimo, han asustado a los venezolanos, temerosos de un caos más profundo.
Keila Leiba, una ingeniera en sistemas de 44 años, tenía planes de emigrar a México a inicios de 2019, pero tras los anuncios tratará de acortar los plazos.
“Antes tenía planes a finales de este año o principios del que viene. Pero ahora puede ser en un mes o mes y medio (...) En Venezuela “no veo oportunidades. Trabajas, trabajas, trabajas y (...) no tienes acceso a lo más importante: la alimentación”.
Con un salario mínimo mensual de unos pocos dólares, la comida está fuera del alcance de muchos. Para quienes se quedan, el problema es cómo emigrar tras la depreciación de la moneda y con una inflación anual que la oposición estima en 82 mil por ciento.
Empresarios se dicen en riesgo. El paquete de reformas económicas del gobierno de Nicolás Maduro provocará mayor “inestabilidad”, lejos de solucionar la aguda crisis de Venezuela, advirtió el sector empresarial.
Las medidas “aumentarán la inestabilidad de la economía. No observamos la posibilidad de que el gobierno actual pueda recuperar la confianza necesaria para que un plan de ajustes sea creíble”, dijo Carlos Larrazábal, presidente de Fedecámaras, principal patronal del país.