Más Información
Sheinbaum explica reducción a presupuesto para protección a migrantes mexicanos; “Sí hay un ajuste, tiene que ver con los altos salarios"
Denuncian agresión de presuntos militares contra trabajadores en Tamaulipas; una de las víctimas falleció, tenía huellas de tortura
México hablará con Trump sobre el T-MEC en febrero; no es obligación del país tener órganos autónomos, afirma Ebrard
Bruselas.— Luego de perder el apoyo de un tercio de los miembros de su bancada parlamentaria, la primera ministra británica Theresa May anunció que no encabezará al Partido tory en la próxima convocatoria electoral, mientras buscaba concesiones de los líderes de la Unión Europea (UE) en el acuerdo del Brexit.
“En mi corazón me encantaría poder dirigir al Partido Conservador a las próximas elecciones generales, pero creo que el partido preferiría participar con otro líder”, declaró May.
En caso de que su gobierno sobreviva al terremoto político en el que se encuentra, se prevé que la próxima elección general sea en 2022.
La primera ministra sobrevivió el miércoles a una moción de confianza presentada por 48 miembros de su Partido Conservador inconformes con el resultado de las negociaciones de salida del Reino Unido de la UE. May logró continuar al frente de la formación y el gobierno tras obtener 200 votos a favor y 117 en contra.
Ayer visitó Bruselas en busca de concesiones de la UE para facilitar la aprobación del plan de Brexit ante un escéptico Parlamento británico. En particular, busca garantías respecto al backstop, el mecanismo de salvaguarda para evitar una frontera física entre Irlanda del Norte y la República de Irlanda.
En un principio se pensaba que sería suficiente una declaración política de la UE de que el instrumento no sería utilizado para dejar a Gran Bretaña anclada a las estructuras y reglas comunitarias por tiempo indefinido, pero luego de la crisis desencadenada como consecuencia del aplazamiento del voto en West-minster, previsto inicialmente para el 11 de diciembre, es evidente que si May no logra certidumbre jurídica, el acuerdo de divorcio no tendrá ninguna probabilidad de sobrevivir cuando sea votado por los diputados, probablemente en enero.
A pesar de los aprietos por los que pasa su contraparte británica, los 27 líderes europeos mantienen la postura de que el texto alcanzado en noviembre no será renegociado.
Hasta ahora, lo más que ofrece la Unión es una mejor interpretación, clarificación y explicación del contenido del documento de 585 páginas y sus 147 compromisos.
Incluso, el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, dijo que la UE intensificará sus preparativos para un divorcio con Reino Unido sin acuerdo.
“El trato que tenemos es bueno. Creo que Theresa May también entiende que no habrá una nueva negociación (…) pero creo que hay buena disposición de nuestro lado para explicar mejor la futura relación”, dijo el canciller austriaco, Sebastian Kurz, que tiene la presidencia semestral de la UE. La misma lectura tiene la canciller alemana, Angela Merkel, así como Mark Rutte, primer ministro de Holanda, uno de los países que se verán más afectados en el escenario de salida sin acuerdo, el próximo 29 de marzo.