En más de cinco años de gobierno, la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador se ha confrontado con diversos gobiernos, lo que ha repercutido en que tres países hayan expulsado al embajador mexicano en esas naciones.
Además el gobierno mexicano se ha enfrentado y polemizado con los gobiernos de España, Panamá, e incluso con EU.
El caso más reciente es Ecuador quien este jueves declaró persona non grata a la embajadora Raquel Serur Smeke, después de que el presidente López Obrador acusara que el magnicidio del candidato ecuatoriano Fernando Villavicencio, en agosto de 2023, hizo que cayera la intención de voto de Luisa González, la candidata correísta que lideraba las encuestas.
El primer caso de que un embajador mexicano fue expulsado ocurrió en Bolivia, en diciembre de 2019.
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La entonces presidenta interina Jeanine Áñez expulsó a la embajadora María Teresa Mercado y a dos diplomáticos españoles, luego de un incidente en la Embajada de México en La Paz, hasta donde llegaron los funcionarios españoles, cuyos autos fueron retenidos por la administración de Áñez. La mandataria alegó entonces que en realidad la encargada de negocios y el cónsul de España habían ido a la legación mexicana para tratar de sacar al exministro boliviano Juan Ramón Quintana, brazo derecho de Evo Morales, a quien López Obrador asiló, luego de que éste renunciara a su cargo, en ese noviembre, tras unas cuestionadas elecciones. Áñez quedó como presidenta interina, pero fue detenida después y condenada por delitos relacionados con un “golpe de Estado”. México declaró la expulsión de Mercado como una “decisión política”.
Dos años después fue Perú el que declaró persona non grata al embajador de México, Pablo Monroy Canesa, por las expresiones del gobierno de López Obrador respecto a la situación peruana, tras la destitución del presidente Pedro Castillo.
López Obrador todavía no reconoce a la presidenta Dina Boluarte, a quien llama “espuria”, y exige la liberación de Castillo, a quien considera mandatario “legítimo”. La familia de Castillo sí recibió asilo en México.
El presidente López Obrador descartó ayer romper relaciones con Ecuador y reveló que ordenó enviar un avión de la Fuerza Aérea Mexicana (FAM) para regresar a Serur Smeke a nuestro país. El Mandatario federal aseguró que está dispuesto a dar silo y traer a México al exvicepresidente ecuatoriano, Jorge Glas, acusado de corrupción por el caso Odebrecht, quien se encuentra dentro de la Embajada de México en Ecuador.
El presidente López Obrador también aseguró que pese a estas diferencias, no se suspenderá el programa de retorno de migrantes ecuatorianos, donde el gobierno mexicano les otorga 110 dólares mensuales, pese al conflicto diplomático que hay con Ecuador. “No se suspende el programa”, dijo.