“A Nicolás Maduro nadie lo reeligió, fue derrotado en una elección, y perdió 70/30 frente a Edmundo González, y si a esto se hubieran sumado los votos del exterior hubieran sido 80/20”, dice, en entrevista con EL UNIVERSAL, Leopoldo López, líder opositor venezolano que vive en el exilio, y para quien el único camino que le queda al presidente venezolano, tras las elecciones del 28 de julio, es el de “las armas”.
El Consejo Nacional Electoral (CNE) otorgó el triunfo a Maduro, pero la oposición difundió actas electorales, avaladas por países como Estados Unidos, que muestran que el ganador de los comicios fue el candidato Edmundo González Urrutia. El gobierno venezoano pidió al Tribunal Supremo revisar las denuncias, pero la oposición señala que no se trata de un análisis imparcial, dada la cercanía del tribunal con Maduro.
En este contexto, López afirma que el mandatario “no tiene apoyo, el chavismo ya no tiene arraigo, es pasado. Lo que le queda a Maduro son las armas, la represión y la manipulación de las instituciones como el CNE y del tribunal electoral para imponer un fraude”. Sin embargo, aseguró que frente a la represión, los venezolanos han superado el miedo y salido a las calles para “seguir presionando, en conjunto con los países democráticos que acompañan esta victoria histórica” de la oposición.
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López, exalcalde de Chacao, fue detenido, señalado instigar las protestas de 2014. En 2015, fue condenado a casi 14 años de prisión por “incitación a la violencia”; en julio de 2017 se le conmutó la pena a casa por cárcel. Menos de un mes después, volvió a la prisión de Ramo Verde y a los días regresó a casa de nuevo. Estuvo bajo arresto domiciliario hasta abril de 2019, cuando fue liberado y se refugió en la embajada de España en Caracas. Finalmente, en octubre de 2020 escapó de Venezuela y hoy vive con su familia en España.
Cuestionado sobre todo lo que vivió, señaló: “El tiempo no se supera, ahora es pasado, pero todo el tiempo que estuve en la cárcel traté de invertirlo de la mejor manera como sucede en circunstancias que uno no quisiera estar. Hoy tampoco quisiera estar en el exilio, quiero estar en Venezuela, pero trato de hacer todo lo que pueda para apoyar la lucha por la libertad en mi país, apoyando a mis hermanos que están luchando en cada rincón y también de la mano de millones de venezolanos que estamos fuera, porque tenemos la obligación moral y patriota de elevar la voz de lo que está ocurriendo en Venezuela”.
López advirtió sobre lo que significaría para el país un tercer mandato con Nicolás Maduro: “Sería más tragedia, dolor, muerte, oscuridad, desesperanza, enfermedad, migración masiva, tragedia humanitaria, desempleo”. Maduro, explicó, “personifica un país que se está cayendo a pedazos, destruyó la economía, se colapsó la democracia, hay una tragedia humanitaria que generó el mayor éxodo migratorio del planeta tierra. Por eso la gente votó en contra de él”.
Maduro, dijo, sólo puede imponerse “por un arrebato a la fuerza de la voluntad de los venezolanos”. Sin embargo, añadió, “no creo que eso sea sostenible. Tarde o temprano (más temprano que tarde) la voz y la voluntad de los venezolanos se hará sentir con fuerza”. Subrayó, como ha hecho la oposición desde el 28 de julio, que “Edmundo González es presidente electo, el 10 de enero es la toma de posesión y ese día Edmundo debe de asumir la presidencia legítima y democrática de Venezuela”.
Sobre las pruebas del triunfo de González, recordó que se pueden ver 85% de las actas en la página web de Comando Venezuela. Estas actas han sido avaladas por el gobierno de Estados Unidos, así como por medios como The Washington Post y la agencia de noticias Associated Press, que tuvieron acceso.
“No hay manera de tapar el sol con un dedo, ni de ocultar esta victoria aplastante de Edmundo frente a Maduro. Lo único que le queda a la dictadura es el terror, la represión y la tortura a quienes están liderando este proceso. Nicolás Maduro perdió de manera aplastante frente al 70% que logró Edmundo González”.
En ese sentido, se mostró confiado en que “esta verdad sea ratificada, que ya lo han hecho países como Perú, Argentina, Costa Rica, Uruguay Estados Unidos. Edmundo González ganó como presidente electo, y esperamos que más democracias del mundo lo reconozcan, y que en consecuencia hagan lo que corresponda para continuar presionando”.
Para López, la comunidad internacional tiene una herramienta de presión, como son las sanciones: “Pueden ser o generales a la economía o individuales a personas que han cometido violaciones a Derechos Humanos y actos de corrupción. Yo en lo personal creo que tanto la Unión Europea como Estados Unidos deben de reconsiderar seriamente el restringir nuevamente lo que fue el levantamiento de sanciones que se le dio a Maduro, en los acuerdos de Barbados. Maduro no cumplió y creo que deben de restablecerse las sanciones, al igual que a cada individuo responsable por el fraude electoral, por estar cometiendo hoy a esta fecha violaciones a los Derechos Humanos y deben de ser sancionados”.
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López hizo un llamado a la comunidad internacional, incluyendo a México. “Mi llamado a todos los países democráticos del mundo, no importa si son de derecha o de izquierda, es que se pongan del lado del pueblo. Lo elemental en una democracia es respetar a la gente y ésta voto por un cambio. Nosotros esperamos de México siendo uno de los países más influyentes de todo el continente acompañe al pueblo venezolano.
El líder opositor recalcó que el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, “entiende lo que es un fraude y lo que ocurrió en Venezuela no fueron dos o tres puntos, fueron 40 puntos de diferencia, así que esperamos del presidente López Obrador que se ponga del lado de los venezolanos, del voto emitido el 28 de julio; esperaríamos de México que esté liderando el reconocimiento a lo que fue la expresión de Venezuela y no a la dictadura. Maduro se ha quitado la careta, es el peor dictador del siglo XXI que tuvimos en el continente”.
Lamentó que “en Venezuela hay desapariciones forzadas, persecución, tortura, muerte y se está dando masivamente en estos momentos; por eso nosotros esperamos que todos los países de los gobiernos democráticos de todo el mundo, acompañen la decisión del pueblo venezolano de haber votado por el cambio, por Edmundo González y que éste sea reconocido como presidente electo. Eso es lo que esperamos de México y de los países de la región”.