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Roma. La primera ministra de Italia, Giorgia Meloni, que se perfila como una de las principales interlocutoras en Europa de la futura Administración estadounidense, dijo estar preparada para trabajar con Donald Trump tras haberse reunido recientemente con el presidente electo de Estados Unidos en una reunión por sorpresa en Mar-a-Lago.
"Bonita noche con Donald Trump, a quien agradezco la acogida. Listos para trabajar juntos", declaró Meloni en sus redes sociales, en el primer mensaje de la mandataria sobre su encuentro con el presidente electo estadounidense en su residencia de Mar-a-Lago, en Florida, en la noche entre el sábado y el domingo.
Fue un viaje que la oficina de Meloni mantuvo en secreto hasta casi el último momento y que no se dio a conocer hasta pocas horas antes de aterrizar su avión en Estados Unidos.
De hecho, más allá de esta reciente declaración de la mandataria y unas fotos con Trump, el equipo de Meloni no ha dado más detalles en público de lo que trató con el presidente electo.
Con todo, fuentes de medios italianos y estadounidenses aseguraron que trataron varios temas, entre estos el asunto de los aranceles, la guerra en Ucrania, el conflicto en Medio Oriente y el arresto en Irán de la periodista italiana Cecilia Sala. Según analistas y medios, este fue el elemento principal que llevó a Meloni a embarcarse en el viaje para ver a Trump en su residencia de Florida.
La detención de Sala se trata de un caso vinculado al arresto en Italia del ingeniero iraní Mohammad Abedini, por el que Estados Unidos pide la extradición por acusaciones de proporcionar componentes de drones a la Guardia Revolucionaria iraní.
Todo ello tensa los lazos de Roma con Teherán, ha metido a Italia en un caso con amplias ramificaciones internacionales y sumerge a su gobierno en el ojo del huracán de las disputas entre Estados Unidos e Irán.
Dado lo delicado que es el asunto -mientras diplomacia y servicios secretos italianos trabajan para lograr la liberación de la periodista- la familia de Salas ha pedido el silencio de la prensa, y se asume que el caso fue una cuestión central que Meloni abordó con Trump a pocos días de que este asuma de nuevo el poder.
El contacto entre Meloni y Trump también pone de relieve el fin del mandato del demócrata Joe Biden, que justo entre el 9 y 12 de enero hará una visita oficial a Italia, su último viaje al exterior como presidente antes de que Trump regrese a la Casa Blanca.
ss
