Seúl.— Las dos Coreas pondrán en marcha hoy una línea telefónica directa entre sus líderes, informó ayer la oficina presidencial de Seúl. Además, el presidente surcoreano, Moon Jae-in, declaró que se tenía que buscar un tratado de paz para poner fin oficialmente a la Guerra de Corea.
“La línea directa entre los líderes se conectará y los técnicos realizarán una llama de prueba”, anunció un portavoz de Seúl que reconoció que todavía no se ha fijado la fecha para la primera llamada.
Moon, y el líder norcoreano, Kim Jong-un, tienen previsto reunirse el 27 de abril en el lado sur de la frontera entre ambos países, técnicamente aún en guerra, una histórica cumbre que se centrará previsiblemente en la desnuclearización del régimen de Pyongyang.
Las dos Coreas no celebrarán diálogos de alto nivel estos días sobre la agenda de la cumbre de la próxima semana entre sus líderes, reportó el Ministerio de Unificación de Seúl.
El anuncio se produce después que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dejó abierta la posibilidad de abandonar su propia reunión cumbre con el líder norcoreano, si no parece ser fructífera.
Moon subrayó la necesidad de imaginaciones valientes y soluciones creativas para librar a Pyongyang de las armas nucleares.
El presidente de Corea del Sur declaró: “Norcorea ha manifestado su voluntad a favor de una desnuclearización total”, según la oficina de Presidencia en Seúl, durante una reunión con directivos de medios surcoreanos.
Moon dijo que llegar a acuerdos generales sobre la desnuclearización, el establecimiento de un régimen de paz y la normalización de las relaciones entre las dos Coreas y Estados Unidos no debería ser difícil de lograr a través de las cumbres entre Corea del Norte y del Sur, y entre Pyongyang y Washington.
Trump dijo el miércoles que esperaba que la cumbre tuviera éxito, pero advirtió que podría cancelarla si no creía que fuera a producir resultados. En una rueda de prensa conjunta con el primer ministro japonés, Shinzo Abe, Trump afirmó que su campaña de “máxima presión” sobre Corea del Norte continuará hasta que Pyongyang renuncie a sus armas nucleares.
“Estados Unidos sigue comprometido con una desnuclearización completa, verificable e irreversible de Corea del Norte”, dijo el jueves el embajador de desarme de Estados Unidos, Robert Wood, en una rueda de prensa en Ginebra antes de una conferencia de dos semanas sobre el Tratado de No Proliferación Nuclear.