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La idea de una guerra en la frontera de Rusia con Ucrania, en Europa, es algo absurdo e inaceptable, aseguró el embajador ruso en México, Víktor Koronelli.
En entrevista con EL UNIVERSAL, el diplomático señaló que Rusia espera que la situación con Ucrania se tranquilice, que los socios extranjeros tomen en cuenta las preocupaciones legítimas que existen en cuanto a la seguridad y que se dejen crear focos de inestabilidad cerca de las fronteras rusas.
Koronelli destacó que México es un país aliado y la relación bilateral tiene un carácter estratégico con base en el respeto mutuo de intereses, coincidencia y cercanía de posiciones.
A Rusia y México, señaló, les une la voluntad y el apoyo mutuo en la causa de contribuir a la creación de un mundo policéntrico, garantizando la estabilidad internacional bajo los principios de no intervención, prohibición de uso de la fuerza en relaciones internacionales y resolución de manera exclusivamente pacífica y diplomática de los conflictos en diferentes partes del planeta.
P. ¿Cuál es la situación que se vive actualmente en el conflicto con Ucrania?
R. En primer lugar, recordemos que se trata de un conflicto interno dentro de Ucrania, desatado por el gobierno nacionalista de Kiev con su política discriminatoria respecto a las minorías del país, una de las cuales es la rusoparlante.
Mientras tanto, la situación en la línea de contacto en Donbás ha sido relativamente tranquila en los últimos días. El número de violaciones del alto el fuego ha disminuido notablemente en comparación con inicios de enero.
P. El entorno político mundial está en alerta por la crisis desatada en la frontera de Rusia con Ucrania. ¿Esto puede cambiar el orden de paz en Europa?
R. La reciente exacerbación de esta crisis se debe en gran medida a la política de ciertos países del Occidente que pretenden provocar discordia entre los pueblos hermanos de Rusia y Ucrania y crear un foco de inestabilidad en Europa complicando así las relaciones entre Rusia y la UE (Unión Europea). Rusia no planea ningún ataque contra Ucrania, como han recalcado en numerosas ocasiones tanto el presidente Vladimir Putin como nuestro canciller Serguei Lavrov. La propia idea de una guerra entre nuestros pueblos o una guerra en Europa nos parece absurda e inaceptable. Estamos convencidos que sin la “ayuda” de Occidente este conflicto habría sido arreglado hace tiempo.
P: ¿Cuál es el objetivo principal de Rusia en esta tensión geopolítica que se vive actualmente?
R. En relación al este de Ucrania esperamos que se tranquilice la situación, que a pesar de todas las dificultades avancen las negociaciones en el formato de Normandía, que se cumplan los Acuerdos de Minsk en su totalidad, que las autoridades de Kiev opten por un diálogo directo con la población de Donetsk y Lugansk para encontrar una solución política duradera a la crisis que se vive. En el plano geopolítico más global Rusia espera que nuestros socios extranjeros tomen en cuenta nuestras legítimas preocupaciones en el ámbito de seguridad y dejen de crear focos de inestabilidad cerca de nuestras fronteras. Básicamente se trata de tres principios: la no expansión de la OTAN y no adhesión de Ucrania y Georgia al bloque; el regreso de la OTAN a las posiciones que existían antes del mayo de 1997; el no despliegue de misiles de corto y medio alcance que puedan amenazar a Rusia, sobre todo, en los países de Europa Oriental.
P. ¿Hay motivos para que el orden de paz internacional entre en pánico?
R. Si hay una amenaza al orden de paz internacional, sin duda esta amenaza no parte de Rusia. No comprendemos la histeria sobre la supuesta “amenaza rusa” a la Alianza. A lo largo de decenios, la OTAN viene reforzando consecuentemente su “flanco oriental”, usando intensamente el territorio de nuevos miembros, creando infraestructura militar y almacenes de armamento. Toda la planificación militar de la OTAN obedece a un solo objetivo: contener a Rusia y lograr la superioridad militar en todos los eventuales teatros de operaciones y espacios operacionales. Quiero recordar que en Rumania y Polonia ya están desplegados componentes de la defensa global antimisiles de Estados Unidos con rampas capaces de lanzar los misiles Tomahawk. Por lo tanto, la última decisión estadounidense de enviar un contingente militar adicional a Polonia no contribuye a calmar la situación en Europa. Además, cabe señalar que la OTAN está aumentando su presencia en los mares Negro y Báltico, la cantidad de ejercicios no planificados en estas aguas ha aumentado significativamente recientemente, lo que también representa una amenaza para Rusia.
P. ¿Rusia cree en la negociación diplomática?
R. Rusia no solo cree en la negociación, sino que constantemente hace una gran contribución a la consolidación de la paz internacional a través de los esfuerzos diplomáticos.
Rusia es uno de los garantes clave de la arquitectura global con el papel protagónico de la ONU, y siendo miembro permanente del Consejo de Seguridad, contribuye a mantener la seguridad global y la estabilidad estratégica. La iniciativa del presidente Vladimir Putin de celebrar una cumbre de los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU busca entablar un diálogo sincero sobre los problemas clave de la actualidad. La declaración conjunta de las cinco potencias nucleares sobre la prevención de una guerra nuclear y la carrera armamentista publicada el pasado 3 de enero está dirigida a reducir el nivel de tensión internacional. Este documento fue preparado a nuestra iniciativa, lo que subrayó de nuevo que Rusia no está interesada en la confrontación, sino en un diálogo equitativo, basado en el respeto mutuo y dirigido a contribuir a la búsqueda del equilibrio de intereses.
P. ¿Crimea se queda en Rusia?
R. Nuestra postura consiste en que la cuestión del estatus de Crimea y la ciudad de Sebastopol se decidió en 2014 cuando pasaron a formar parte inalienable de la Federación de Rusia en el resultado del referéndum, expresión libre de la voluntad de los habitantes de la península. Cabe mencionar que este procedimiento se llevó a cabo de acuerdo con todas las normas del Derecho Internacional. Como dijo bien claro el presidente Vladimir Putin, el tema de la pertenencia de Crimea «está cerrado definitivamente». Nadie debe tener dudas al respecto.
Hoy en día esta región se encuentra entre las provincias rusas que se están desarrollando a mayor ritmo, con altos índices de crecimiento económico. La inauguración en 2018 del Puente de Crimea que conectó la península con la parte continental rusa fue, sin duda, un acontecimiento histórico. Crimea se está convirtiendo en uno de los centros más importantes culturales y artísticos no solo de Rusia sino de todo el mundo. Todos los habitantes de la península sin discriminación cualquiera pueden hablar su lengua natal y tienen la oportunidad de conservar y desarrollar su cultura. Crimea rusa está abierta para los huéspedes extranjeros. Se está creciendo el flujo turístico de muchos países. Con tal motivo invito a nuestros amigos mexicanos a visitar a esta península para que disfruten de su naturaleza, patrimonio histórico y cultural, así como la hospitalidad de sus habitantes.
P. México es un país aliado de Rusia. ¿Ha dialogado con autoridades de la Secretaría de Relaciones Exteriores sobre la situación que se vive en una de las fronteras de su país?
R. No solamente somos aliados. Nuestra relación bilateral tiene un carácter estratégico y se basa en el respeto mutuo de intereses, la coincidencia o cercanía de las posiciones de Moscú y México respecto a los temas importantes del impacto global, tales como el proceso de desarme, la no proliferación de las armas de destrucción masiva, el uso pacífico del espacio ultraterrestre, la seguridad internacional informática, la lucha contra el terrorismo y el tráfico ilícito de drogas, entre otros. Con nuestros colegas de la Cancillería Mexicana mantenemos un diálogo permanente sobre diversos aspectos de la agenda internacional. Asimismo, nuestra postura sobre lo que está pasando alrededor de Ucrania fue divulgada entre la comunidad internacional, y los diplomáticos mexicanos también, en la reunión del Consejo de Seguridad de la ONU celebrada el pasado 31 de enero, donde México ocupa un lugar como miembro no permanente.
P. ¿Sienten apoyo mexicano?
R. A Rusia y México nos une la voluntad y el apoyo mutuos en la causa de contribuir a la creación de un mundo policéntrico, garantizando la estabilidad internacional bajo los principios de no intervención, prohibición de uso de la fuerza en las relaciones internacionales y resolución de manera exclusivamente pacífica y diplomática de los conflictos en diferentes partes del planeta. Por cierto, estos principios han sido compartidos por Juan Ramón de la Fuente, Embajador mexicano ante la ONU, durante su intervención en la mencionada reunión del Consejo de Seguridad.
P. ¿Rusia puede abandonar este conflicto? ¿De qué manera?
R. Si se refiere al conflicto en el este de Ucrania, ya comenté la postura de Rusia al respecto. Puedo repetir que Rusia no es parte de este conflicto. Además, quiero añadir lo que dijo recientemente el ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Serguei Lavrov: Rusia no ha amenazado –en ninguna parte, jamás, ni una sola vez por boca de ningún representante oficial suyo– al pueblo ucraniano. Si se trata de la crisis creada por Occidente en torno a Ucrania, cualquier conflicto puede ser resuelto si las partes toman en consideración las condiciones y respetan los intereses de manera recíproca. Nuestras condiciones son las garantías de seguridad, de que la OTAN pondrá fin a su expansión hacia las fronteras de Rusia y no admitirá nuevos miembros del espacio postsoviético, cumpliendo las promesas dadas por los mismos Estados Unidos al término de la Guerra Fría de “no avanzar ni una pulgada hacia el este”. No puedo dejar de referirme a las declaraciones sobre el particular del presidente Vladimir Putin, hechas el 1 de febrero pasado: En los documentos doctrinales de Ucrania se plantea como uno de sus objetivos recuperar Crimea, incluso por la vía militar. Imaginemos que Ucrania, como miembro de la OTAN, repleta de armamento ofensivo como Polonia o Rumania, inició esa operación militar en Crimea, siendo este el territorio soberano de Rusia. ¿Qué quieren que hagamos en este caso? ¿Combatimos con la OTAN?