Hace apenas unos días, Kevin K. McAleenan advertía que la frontera sur de Estados Unidos estaba en un “punto de quiebre” . Ahora, será el encargado de encabezar el departamento que verifica la seguridad no sólo allí, sino en todo el país.
McAleenan, nominado por Donald Trump para encabezar interinamente el Departamento de Seguridad Nacional (DHS), lleva años viendo el tema de la frontera. En marzo de 2018 fue nombrado comisionado de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP), un cargo que ya ejercía interinamente desde enero de 2017.
McAleenan
, abogado de profesión de 47 años graduado de la Escuela de Leyes de la Universidad de Chicago , lleva muchos años relacionado con la CBP y el Servicio de Aduanas. Antes de ser comisionado interino, era subcomisionado y, previamente, dirigió las operaciones de seguridad de la CBP en el Aeropuerto Internacional de Los Ángeles y en otras 17 instalaciones aeroportuarias.
En distintos momentos ha alertado de la situación migratoria en la frontera sur de Estados Unidos . La más reciente, el pasado 27 de marzo, cuando dijo que la situación estaba en un “punto de quiebre”. Dos días después, el presidente Donald Trump amenazaba con cerrar la frontera.
Antes de eso, el nombre de McAleenan salió a relucir después de que el pasado 25 de noviembre, agentes fronterizos de Estados Unidos lanzaron gas lacrimógeno a un grupo de migrantes en el cruce de San Diego-Tijuana cuando algunos intentaban pasar del lado estadounidense.
Cuestionado por el uso del gas, McAleenan lo justificó diciendo que los agentes enfrentaban una situación “difícil” y que “el gas pimienta y el gas CS -lacrimógeno- están autorizados para ser utilizados en caso de conducta agresiva”. Señaló, además, que los migrantes lanzaban piedras a los oficiales.
Antes, en julio, se manifestó durante un evento a favor de que Estados Unidos llegara a un acuerdo de “tercer país seguro” con México, pacto que el gobierno mexicano rechaza.
“Creo que necesitamos encontrar una manera de trabajar junto con México”, dijo.
En ese momento, señaló que la crisis generada por los flujos migratorios estaba causando un “daño colateral” a México al estar en la ruta del tráfico humano. Advirtió, al estilo Trump, que la tasa de homicidios en Tamaulipas se había duplicado en los últimos 18 meses y que 122 candidatos políticos habían sido asesinados en la campaña electoral mexicana.
En su perfil en la página de la CBP se resalta que bajo el liderazgo de McAleenan , quien alguna vez pidió al Congreso estadounidense presionar más a México para hacer algo en el tema migratorio, “la CBP ha desarrollado estrategias que protegen las fronteras de la nación del terrorismo y atacan a las redes criminales trasnacionales”.
lsm