Un juez de Cartagena de Indias se negó a casar a dos mujeres alegando que iba en contra de su "moral cristiana", una situación que ha desatado una polémica en Colombia donde organizaciones sociales le recuerdan que desde 2016 el matrimonio entre personas del mismo sexo es legal en el país.
"No puedo casar a dicha pareja del mismo sexo porque ello contraría mi moral cristiana, va en contra de mis principios esenciales y cuando exista conflicto entre lo que dice la ley humana y lo que dice la ley de Dios, yo prefiero la ley de Dios", expresó el togado en la resolución en la que rechazó la solicitud de celebrar el matrimonio.
En 2018, la Corte Constitucional aprobó el matrimonio de parejas del mismo sexo y, con esa decisión, ni jueces ni notarios pueden negarse a celebrar estas uniones.
En esa línea el juez décimo civil municipal de Cartagena, Ramiro Eliseo Suárez, argumentó que su decisión "no contraría que vivamos en un Estado Laico, como lo ha dicho la Corte", pues considera que la Constitución tiene una "estructura doctrinal" porque "el preámbulo invoca la protección de Dios".
En ese sentido expresa que "la laicidad predicada por los magistrados, y por varios doctrinantes, es, con el mayor respeto, artificiosa" y añade que su decisión "no es discriminación" sino "comprensión de las normas que nos rigen".
Lee más:
Críticas a la decisión
Para el abogado Mauricio Albarracín, investigador de la organización DeJusticia y activista LGBTI, "el matrimonio igualitario es un derecho constitucional y está fuera de toda discusión jurídica y política".
"El juez que se negó a hacer el matrimonio de dos mujeres en Cartagena afecta el derecho a constituir una familia y abusa de su poder como servidor público", dijo Albarracín en un mensaje publicado en sus redes sociales.
En esa misma línea, el senador Roy Barreras, del Partido de la U, manifestó que la decisión del togado es "absolutamente individual" y "no puede imponerse como dogma a todos los demás".
"El juez décimo civil de Cartagena es un peligro para la sociedad porque atropella derechos de las minorías y además abusa de Dios (...) La sentencia desconoce la Constitución para imponer su deformada visión religiosa. No es un juez sino un inquisidor del medioevo", expresó Barreras.
Por ello dijo que lo demandó "penal y disciplinariamente para sacarlo del cargo antes de que decida condenar a alguien a la hoguera o apedrear a la mujer infiel".
Entre tanto la ONG Caribe Afirmativo, que defiende los derechos de la comunidad LGBTI , promovió en redes sociales la tendencia "La homofobia no es cristiana" y recordó que "la Constitución blinda los derechos de toda la ciudadanía".
"Las autoridades no pueden alegar motivos morales para abstenerse de tramitar y decidir un asunto puesto a su consideración", dice un aparte de una sentencia de 2009 de la Corte Constitucional citado por Caribe Afirmativo.
lsm