El jefe de la diplomacia estadounidense, Antony Blinken , hizo el jueves una visita sorpresa a Afganistán para presentar el plan de la administración Biden de retirar todas las tropas estadounidenses antes del 11 de septiembre, cuando se cumpla el 20º aniversario de los atentados de 2001.
Este viaje, que no aparecía en la agenda oficial, se produce el día después de que el presidente estadounidense, Joe Biden , anunciara la retirada de tropas, que tendrá lugar cuatro meses más tarde de la fecha límite del 1 de mayo fijada en un acuerdo del expresidente Donald Trump con los talibanes.
Blinken
se reunió con el presidente afgano, Ashraf Ghani, y con altos cargos militares estadounidenses en Afganistán , para debatir el anuncio de Biden de que había llegado el momento de "poner fin a la guerra más larga de Estados Unidos ", que comenzó en 2001.
"Quiero demostrar con mi visita que sigue vigente el compromiso de Estados Unidos con la República Islámica y el pueblo de Afganistán ", aseguró el secretario de Estado estadounidense tras su reunión con el presidente afgano.
"La alianza esta cambiando, pero la alianza se mantiene", añadió.
Durante otra reunión con el primer ministro Abdallah Abdallah, que lidera la delegación afgana en las negociaciones de paz con los talibanes, Blinken dijo que empieza "un nuevo capítulo que estamos escribiendo juntos".
Washington tiene desplegados unos 2 mil 500 soldados en Afganistán , que forman parte de la misión de la OTAN en este país de Asia Central.
Antes de su encuentro con Ghani, Blinken se reunió en la embajada estadounidense en Kabul con varios militares estadounidenses de alto rango.
"Lo que hicisteis vosotros y vuestros predecesores en los últimos 20 años es realmente extraordinario", afirmó el jefe de la diplomacia.
La noticia del retiro de tropas estadounidense generó cierta sorpresa en Afganistán y muchos analistas creen que podría sumir al país en una nueva guerra civil o permitir la vuelta al poder de los talibanes, derrocados a finales de 2001.
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"Podría hacer que perdiéramos todo aquello por lo que trabajamos y luchamos juntos durante los últimos 20 años y podría poner en riesgo la seguridad de todos en Afganistán", lamentó Metra Mehran, una activista de Kabul defensora de los derechos de las mujeres.
Sin embargo, Washington considera que ha llegado el momento de la retirada militar, tras 20 años de guerra y 2.400 soldados muertos.
"No podemos seguir el ciclo de extender o de expandir nuestra presencia militar en Afganistán esperando crear las condiciones ideales para una retirada", afirmó Biden en su discurso del miércoles.
Sin embargo, el retraso en la retirada, de cuatro meses respecto a la fecha prevista inicialmente, irritó a los dirigentes de los insurgentes afganos.
"Esto da vía libre a los mujaidines del Emirato Islámico para que hagan acciones en respuesta a ello", aseguraron los talibanes en un comunicado emitido poco después de la llegada de Blinken a Afganistán .
El portavoz de los insurgentes Zabihullah Mujahid ya había advertido el miércoles en Twitter que "si se rompe el acuerdo y las fuerzas extranjeras fracasan en abandonar el país en la fecha fijada, esto agravará los problemas y aquellos que no respetaron el acuerdo asumirán las responsabilidades de ello".
Los soldados estadounidenses no se enfrentaron directamente con los talibanes durante el último año, pero aportan un apoyo aéreo crucial al ejército afgano.
Ghani, tras una conversación telefónica con Biden, defendió el miércoles que las fuerzas afganas son "totalmente capaces" de defender el país.
Los enfrentamientos entre el ejército afgano y los talibanes no cesan, a pesar de meses de negociaciones de paz entre ambos bandos en Catar.
Turquía anunció esta semana que acogerá el 24 de abril una conferencia de paz sobre Afganistán , pero los talibanes advirtieron que no participarán en ella.
Hace una década, Estados Unidos tenía unos 100 mil soldados en Afganistán . Al final de la presidencia de Trump, la cifra se había reducido a 2 mil 500. En febrero de este año, la OTAN tenía unos 10 mil efectivos en el país.
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