El republicano JD Vance, senador por Ohio de 40 años, es la cara del trumpismo 2.0, la que repite las mentiras que los indocumentados haitianos se comen a las mascotas, incluidos perros y gatos, hasta su apoyo al muro fronterizo y a la invasión del ejército estadounidense para combatir el narcotráfico en América Latina.
También es la nueva cara del trumpismo que ha dicho que “si tengo que crear narrativas para que los medios estadounidenses de verdad le presten atención al sufrimiento del pueblo estadounidense, entonces eso es lo que voy a hacer”.
Conocido por su autobiografía Hillbilly Elegy, publicada en 2016, se presenta como “un chico de clase trabajadora”: nació y creció en la ciudad de Middletown, Ohio; se unió a la Infantería de Marina y sirvió en Irak, y después se graduó de la Universidad Estatal de Ohio y de la Facultad de Derecho de Yale. También trabajó como capitalista de riesgo en Silicon Valley.
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En el libro muestra cómo, según él, es la vida de los pobres en las zonas rurales estadounidenses. Incluso durante su presentación en la Convención Nacional Republicana declaró que “a la gente de todas las comunidades olvidadas de Michigan, Wisconsin, Pennsylvania, Ohio y cada rincón de nuestra nación (...) nunca olvidaré de dónde vengo”.
Y se muestra como un firme defensor de Trump, pese a que en un pasado dijo que el expresidente era “el Hitler de Estados Unidos”. De acuerdo con el corresponsal político Michael C. Bender, en el The New York Times, “Vance se está convirtiendo rápidamente en su principal emisario: incorporando sus tácticas y su lenguaje a la sique nacional e impulsando algunas de las líneas argumentales clave de las elecciones de 2024”.
Bender añadió en el medio estadounidense que para Vance “la publicidad es primordial, la precisión está pasada de moda y la controversia es a menudo su propia recompensa. El enfoque está provocando nuevas críticas y ganando adeptos”.
En la Convención Nacional Republicana añadió que “[Trump] es duro, pero se preocupa por la gente. Puede enfrentarse desafiante a un asesino en un momento y pedir la reconciliación nacional al siguiente”.
Ese trumpismo contrasta con el Vance de 2016, cuando decía “que nunca apoyaría a Trump”, incluso lo llamó “peligroso” y “no apto” para el cargo. Sin embargo, luego de que el senador por Ohio conoció al expresidente, en 2021, cambió totalmente su opinión y comenzó a citar los logros del exmandatario cuando estuvo en la Casa Blanca.
Incluso, de acuerdo con Josh Holmes, un estratega republicano, “existe una gran diferencia generacional entre JD Vance y todo lo que hemos visto hasta ahora (...) Y para una generación más joven, ha sido notablemente eficaz en el papel de perro de ataque”.
Además, Vance se ha lanzado contra los medios de comunicación y los ha culpado de engañarlo sobre el “verdadera carácter” del exmandatario republicano, recordó Bender en el Times. Para muestra, en la Convención Nacional Republicana elogió al exmandatario y declaró que “nunca daré por sentada la confianza que ha puesto en mí. Qué honor ayudarle a plasmar la extraordinaria visión que tiene para el país. Prometo a todos los estadounidenses, sean del partido que sea, que lo daré todo a su servicio”, añadió el republicano Vance.
En la convención también criticó que “la clase dominante de Estados Unidos” destruyó comunidades como la de su ciudad natal “con acuerdos comerciales y guerras extranjeras”. “Desde Irak hasta Afganistán, desde la crisis financiera hasta la Gran Recesión, desde las fronteras abiertas hasta el estancamiento de los salarios, la gente que gobierna este país ha fracasado una y otra vez”, afirmó entonces.
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Por lo anterior, volvió a alabar al exmandatario y dijo que Trump es “la última y la mejor esperanza de Estados Unidos para restaurar lo que, si se pierde, tal vez nunca se vuelva a encontrar”.
Sobre la migración, añadió que “es parte de nuestra tradición acoger a los recién llegados. Pero cuando los acogemos, lo hacemos bajo nuestras propias condiciones”.
Incluso se ha mostrado a favor de las deportaciones masivas que promete Trump. “Creo que es interesante que la gente se centre en: Bueno, ¿cómo deportas a 18 millones de personas? Empecemos con un millón. Ahí es donde Kamala Harris ha fallado, y luego podemos ir desde ahí”, dijo Vance a la ABC.
La lucha contra las drogas y su mamá
El compañero de fórmula de Trump también ha apoyado el uso del ejército estadounidense en la lucha contra el fentanilo en México.
En este caso, su apoyo viene de su historia familiar. Su mamá, Beverly Aikins, luchó contra la depresión tras varias rupturas amorosas, pero sucumbió ante las drogas. Según The New York Times, Vance describió cómo solía esconderse mientras su madre peleaba con sus amantes.
En su libro, Hillbilly Elegy, Vance recordó cómo halló a su mamá inconsciente por una sobredosis de heroína. Entonces decidió luchar contra las drogas y los cárteles mexicanos. Ha asegurado que la solución al narco en México es que los cárteles de las drogas sean declarados y atacados como grupos terroristas.
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Sobre el “EU primero”, Charlie Kirk, fundador del grupo activista conservador Turning Point USA, ha declarado que Vance expone de manera convincente esta visión y podría ayudar a Trump en estados que perdió por escaso margen en 2020, tales como Michigan y Wisconsin, que comparten los valores, la demografía y la economía de Ohio.
Vance también indicó que “estamos comprometidos con la clase trabajadora. No compraremos energía a países que nos odian. Estamparemos ‘Hecho en EU’ en cada producto. Volveremos a construir fábricas”. En la convención mencionó que “mandaremos a nuestros hijos a la guerra sólo cuando sea necesario. Y cuando golpeemos, lo haremos con fuerza”.
En la guerra en Ucrania se ha mostrado en contra de brindar más apoyo al país del presidente Volodimir Zelensky, quien incluso lo ha tachado de “demasiado radical”.
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“Es demasiado radical”, dijo Zelensky en una entrevista con The New Yorker en septiembre. Zelensky añadió que el “mensaje de Vance parece ser que Ucrania debe hacer un sacrificio”. “La idea de que el mundo debería poner fin a esta guerra a expensas de Ucrania es inaceptable”, continuó el presidente ucraniano.
Vance también ha presionado para lograr un compromiso con el presidente ruso Vladimir Putin. “Nunca he argumentado que Putin sea una persona amable y amigable. He argumentado que es una persona con intereses distintos, y Estados Unidos tiene que responder a esa persona con otros intereses”, dijo Vance a principios de este año en la Conferencia de Seguridad de Múnich.
Así es el nuevo rostro del trumpismo, el 2.0, el que ha sido calificado por el representante por Indiana Jim Banks como “el Futuro del movimiento Estados Unidos Primero”.