Israel afirmó el viernes que sus operaciones militares en Rafah, en el extremo sur de la Franja de Gaza, no suponen ningún "riesgo de destrucción de la población civil palestina", después de que la Corte Internacional de Justicia (CIJ), máxima instancia judicial de la ONU le ordenara detenerlas.
"Israel no ha llevado ni llevará a cabo operaciones militares en la zona de Rafah que generen condiciones de vida que puedan causar la destrucción de la población civil palestina, total o parcialmente", declaró el asesor de Seguridad Nacional, Tzachi Hanegbi, en un comunicado conjunto con el portavoz de la cancillería.
mcc