Tel Aviv.— Israel intensificó ayer su ofensiva terrestre en Gaza con el envío de nuevas tropas, tras atacar ya más de 450 objetivos del grupo islamista Hamas, que gobierna de facto la Franja y cuyos milicianos combatieron a las tropas israelíes en fuertes enfrentamientos en el norte del enclave palestino.
Autoridades mundiales urgieron a aumentar la ayuda a Gaza y manifestantes en todo el mundo reclamaron un alto el fuego, mientras que en el aeropuerto de la república rusa de Daguestán, una muchedumbre irrumpió en busca de israelíes, desatando un operativo que dejó más de 20 heridos.
Aunque la ofensiva terrestre está siendo gradual y las autoridades israelíes hablan sólo de “expansión de las actividades por tierra”, llegan más tropas a Gaza, donde ya se libran combates sobre el terreno. Al mismo tiempo, Israel insiste en que es prioridad rescatar a los rehenes tomados por Hamas, y que ayer los israelíes cifraron en 239.
La cifra de muertos en Gaza rebasa los 8 mil y hay casi 19 mil heridos: “Durante la noche ampliamos la entrada de las fuerzas del Ejército a la Franja de Gaza y se unirán a las fuerzas que ya están combatiendo”, informó el portavoz militar, contralmirante Daniel Hagari.
“Los combates terrestres en el norte de la Franja de Gaza continúan, estamos avanzando en las etapas de la guerra según el plan, estamos ampliando gradualmente la actividad terrestre y el alcance de nuestras fuerzas”, dijo.
Israel rechazó de tajo la posibilidad de una tregua y arreció también los ataques aéreos.
“Nuestros combatientes libran actualmente intensos combates con ametralladoras y armas antitanque contra las fuerzas de ocupación enemigas en el noroeste de Gaza”, afirmaron en un comunicado las Brigadas Ezzedin al Qassam, el brazo armado de Hamas.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, prometió “aniquilar” al movimiento islamista en una guerra que será “larga y difícil”.
En una llamada telefónica, el presidente estadounidense, Joe Biden, pidió a Netanyahu permitir la entrada inmediata de más ayuda humanitaria a Gaza y reiteró que debe cumplir con el derecho internacional, que “prioriza la protección de los civiles”.
Preocupa especialmente la situación en el hospital Al Quds (Jerusalén), el principal de Gaza, luego de que la Media Luna Roja advirtiera que Israel ordenó evacuar el lugar y amenazara con bombardearlo. La Organización Mundial de la Salud (OMS) dijo que es imposible cumplir la orden “sin poner en riesgo las vidas de los pacientes”. Decenas de miles de personas se manifestaron en Marruecos, España y Grecia para pedir un alto el fuego en Gaza. También hubo protestas en Paquistán y otros países.
En la república rusa de Daguestán, de mayoría musulmana, cientos de manifestantes invadieron el aeropuerto internacional de Majachkala tras el anuncio de que un avión estaba llegando de Israel.
La gente entró a las pistas de aterrizaje, tras llamados en canales de Telegram a acudir al aeródromo ante la llegada de vuelos procedentes de Israel y a revisar los automóviles y pasaportes de la gente en el edificio.
Medios rusos como Echo de Daguestán, la turba gritó consignas antisemitas y “Allahu Akbar” (Alá es grande). También se escucharon disparos. Tras varias horas, el lugar fue despejado. En el operativo resultaron heridas más de 20 personas, entre agentes de la policía y civiles del territorio caucásico.
Israel atacó ayer mismo objetivos en Siria, tras el lanzamiento de proyectiles desde el país árabe a territorio bajo control de Israel. Según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos, los ataques aéreos se concentraron en la provincia de Deraa, cercana a los Altos del Golán.