Caracas.— Un ambiente de confusión se vivía ayer por la tarde entre algunos legisladores cuando la policía política de Venezuela ingresó al edificio en el que se encuentran las oficinas del líder opositor, Juan Guaidó, mientras éste se encontraba en una gira por Reino Unido.
“Hay más de 10 funcionarios del SEBIN [el servicio de inteligencia] encapuchados en la parte baja... Tienen apagados los ascensores del edificio, por lo que no hemos podido acceder al piso donde se encuentran las oficinas del presidente Guaidó”, dijo la legisladora Adriana Pichardo.
Además, Guaidó denunció el arresto del diputado opositor Ismael León a manos de agentes de seguridad en Caracas. “Ya se llevaron secuestrado al diputado Ismael León”, afirmó en Londres Guaidó en declaraciones publicadas por medios de Venezuela.
Tras reunirse con el primer ministros británico, Boris Johnson, el líder opositor admitió que el mundo “está escuchando” sus demandas. “Vamos a pedir toda la ayuda necesaria, no tengan duda. Hay cosas que son materia de Estado (...) pero que hemos discutido con cada una de las personas con las que nos hemos reunido y vamos a tener herramientas”, declaró en un encuentro con venezolanos residentes en Reino Unido.
En tanto, Estados Unidos incluyó en su lista negra a 15 aviones de la estatal Petróleos de Venezuela SA (PDVSA), en una nueva medida contra el régimen del presidente Nicolás Maduro. Según el Tesoro de EU, varias naves han sido usadas para transportar a altos cargos del gobierno de Maduro. El secretario estadounidense de Estado, Mike Pompeo, dijo no haber visto “ninguna evidencia de que Maduro esté remotamente interesado en celebrar elecciones libres y justas”.