Bruselas.— El Alto Representante de la Política Exterior de la Unión Europea (UE), Josep Borrell, aseguró que aquellos que piensan que la paz volverá a Europa dejando a su suerte a Ucrania en la confrontación armada con Rusia son “extremadamente ingenuos”.
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“Extraordinaria ingenuidad pedir que se pare la ayuda militar a Ucrania para que la guerra sea más corta y se consiga la paz más ponto”, aseguró el jefe de la diplomacia comunitaria.
“Si dejamos de apoyar militarmente a Ucrania, la paz que conseguiremos no será una paz, sino una victoria de Rusia, y para nosotros sería una extraordinaria amenaza a la seguridad”, apuntó. En su momento, los mandatarios de Colombia, Gustavo Petro, y de México, Andrés Manuel López Obrador, rechazaron el envío de armas y tanques de fabricación alemana a Ucrania. Las palabras de ambos se ganaron el agradecimiento de la Embajada de Rusia en sus respectivos países.
La ayuda letal proporcionada a Ucrania por los aliados desde el inicio de la ofensiva rusa el 24 de febrero pasado asciende a casi 50 mil millones de dólares; de ese monto, la UE y los países miembros han contribuido con 12 mil millones de euros.
El expresidente del Parlamento Europeo aseguró que todo intento de mediación ha fracasado debido a que los delegados que se han entrevistado con el presidente ruso Vladimir Putin siempre se han topado con la misma respuesta: no se detendrá hasta haber alcanzado sus objetivos militares. Por lo tanto, reiteró que “la paz se alcanza siguiendo apoyando militarmente a Ucrania, porque para ganar la paz primero hay que ganar la guerra.
“La guerra en Ucrania ha sido un despertar para Europa, un despertar geopolítico, un despertar frente a una nueva realidad”.
Las declaraciones de Borrell tuvieron lugar en una jornada en la que la clase política y militar de Occidente cerró filas en apoyo a Ucrania a un año del inicio de la invasión por parte de Rusia.
En sesión plenaria del Parlamento Europeo en Estrasburgo, se anunció el envío de más municiones y capacitación para los soldados ucranianos, así como más esfuerzo diplomático.
El mismo mensaje trascendió desde la OTAN reunida a nivel de ministros de Defensa. Ahí el secretario de Defensa estadounidense, Lloyd Austin, reiteró que la Alianza apoyará a Ucrania el tiempo que sea necesario. “Los ayudaremos a avanzar en la contraofensiva de primavera”, indicó el enviado estadounidense.
Alemania, EU y Países Bajos afinan el envío de sistemas de misiles tierra-aire Patriot; Italia y Francia preparan el traslado de sistemas de misiles antiaéreos de alcance medio SAMP/T; Alemania, Polonia, Canadá, Portugal, España, Noruega, Dinamarca y Países Bajos donarán tanques Leopard, mientras que el Reino Unido ha puesto sobre la mesa una compañía de tanques Challenger. Adicionalmente, EU, República Checa y Países Bajos anunciaron más de 90 tanques T-72 de diseño ruso.
“Tenemos que incrementar la ayuda, saquen sus carros de combate de sus cuarteles y dénselos a Ucrania cuanto antes”, dijo Borrell, al subrayar que la guerra se decidirá en esta primavera-verano. El diplomático dijo que la situación en el tablero de batalla es “extremadamente preocupante”, pues por primera vez desde el estallido del conflicto Ucrania tiene menos tropas que su rival; Moscú ha concentrado 360 mil hombres a lo largo de la línea de fuego.
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Austin desestimó la ventaja que supondría la superioridad numérica. Afirmó que se trata principalmente de elementos mal entrenados y armados.
El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, afirmó que la guerra cada vez es más de desgaste, en la que las capacidades logísticas definirán quién prevalece. Es decir, hay un desgaste permanente del oponente que puede llevar al colapso.
Por ello, se requiere que la industria militar opere a su máxima capacidad para producir suficientes municiones, equipo y refacciones. Aseguró que países como EU, Francia, Alemania y Noruega ya firmaron contratos con la industria armamentista para detonar principalmente la producción de municiones, entre otras proyectiles de artillería de 155 milímetros. “Es crucial para garantizar que Ucrania gane y se imponga como una nación soberana e independiente”, subrayó sin poder confirmar, por el momento, que los aliados serán capaces de evitar que Kiev se quede sin municiones.
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