Un río en Brasil se cubrió de una espuma tóxica en días recientes, lo que puso en alerta a los habitantes del municipio de Salto, ubicado a 100 kilómetros de Sao Paulo.
Se trata del río Tiete que tiene mil 100 kilómetros de largo, donde la víspera se pudo observar una densa capa blanca, mientras aves nadaban en sus aguas despreocupadamente.
Durante la estación seca, las aguas residuales que se vierten al río forman una cubierta contaminante compuesta por fosfatos y fósforo.
Tanto el fosfato como el fosforo están presentes en productos biodegradables para el hogar como jabón, detergente, pasta dental y champú.
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