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San José.- Honduras
lanzó en la madrugada de este martes la Operación Amanecer, una primera lucha nacional judicial, policial y migratoria contra las redes de trata y tráfico ilícito de personas, la cual tiene como objetivo rescatar a menores, adolescentes y adultos de ambos sexos de América, África y Asia, quienes fueron reclutados por la criminalidad organizada como víctimas de la explotación sexual comercial, la venta de recién nacidos en adopción ilegal y la migración irregular a Estados Unidos.
La operación, ejecutada en distintas partes del país en un trabajo conjunto del Ministerio Público (Fiscalía General) y de la Policía Nacional de Honduras, se registra en momentos en que Estados Unidos intensificó la presión sobre el Triángulo Norte de Centroamérica para que contenga el masivo e incesante flujo de m igrantes irregulares hacia suelo estadounidense.
La tarea tiene “el objetivo de prevenir, investigar y combatir la criminalidad organizada considerada la esclavitud en tiempos modernos que a diario someten a niñas, niños, adolescentes, mujeres y hombres hondureños”, informó esta mañana el Ministerio Público , sin suministrar todavía los datos de resultados del trabajo desplegado por fiscales y autoridades policiales.
Las dos instituciones persiguen a “quienes recurren a la amenaza, engaño, fraude o abuso de poder para lograr sus fines perversos de explotar sexualmente a víctimas generalmente en vulnerabilidad, consiguiendo que otras personas a cambio de dinero abusen día y noche de ellos o en otras situaciones a que den a sus recién nacidos para adoptarlos irregularmente, pagando y utilizando documentos falsos y valiéndose de empleados públicos para lograrlo”, añadió.
“Este día se trabaja en el rescate a víctimas, en desarticular grupos organizados dedicados a la trata en diferentes modalidades y al tráfico ilegal de connacionales y ciudadanos ecuatorianos, cubanos o de diferentes nacionalidades africanas, con destino a E.U.”, agregó en referencia a que Honduras es punto diario de tránsito de un gran número de migrantes irregulares de América Latina y el Caribe, África y Asia que se dirige a suelo estadounidense y pasa por México.
“En lo referente al tráfico de personas, cabe señalar que los llamados ‘coyotes’ en muchas ocasiones dejan abandonados a los migrantes en el camino, a merced de estructuras que los agreden sexualmente, extorsionan, secuestran o asesinan”, subrayó el reporte oficial.
La Operación Amanecer “va en busca también de criminales que trasladan a las víctimas a otros países para continuar con la explotación de trabajos forzados, obligándolos a delinquir o a pedir en las calles, lo que incluye tortura tanto física y psicológica”, agregó.
La labor la encabeza el Ministerio Público en coordinación con tres dependencias policiales: la Agencia Técnica de Investigación Criminal (ATIC), la Unidad Transnacional de Investigación Criminal (UTIC) y la Dirección Policial de Investigaciones (DPI) y con autoridades administrativas y migratorias.
El trabajo fue ejecutado en coincidencia con una reunión que el secretario interino de Seguridad Interna de E.U., Kevin McAllenan, sostiene hoy en la capital guatemalteca con los secretarios o ministros de Gobernación o del Interior de Guatemala, Honduras y El Salvador, para negociar nuevos mecanismos por los que esos países, que forman el Triángulo Norte, detengan la masiva oleada de migración irregular de centroamericanos.
El flujo se acrecentó al menos desde octubre de 2018, con las caravanas de migrantes irregulares centroamericanos que, a pie y sin visa, viajan hacia México y E.U., para huir de la violencia y de las crisis socioeconómicas en sus naciones de origen y para reunirse o reunificarse con sus familiares que viven, legal o ilegalmente, en territorio estadounidense.
El lunes McAllenan inició una visita a Guatemala . Los países del Triángulo son la fuente principal de la masiva corriente de migrantes irregulares a Estados Unidos.
iarp
