Un carro en la mitad de la calle y un niño, de tres años, adentro mirando sin saber qué hacer. Esa fue la escena que encontraron los policías cuando hacían una ronda habitual. Cuestionaron a las personas que circulaban, pero nadie decía conocerlo. Se acercaron al automotor y notaron que la puerta del copiloto estaba sin seguro, por lo que abrieron y le hicieron una pregunta rápida: “¿Dónde están tus padres?”.
El menor no necesitó de palabras para darles la respuesta; con su dedo señaló un establecimiento que había cruzando la calle. Era un club nocturno, también llamado prostíbulo , en donde al parecer estaba departiendo su papá.
Gracias a la placa del carro, la Jefatura Superior de Policía de Madrid, España, logró establecer la identidad de los padres del menor. Así contactó a la madre para que lo recogiera y lo llevara consigo mientras se iniciaban los demás trámites judiciales .
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Una vez se resguardó al niño, los policías ingresaron al prostíbulo para verificar si en realidad estaba allí. De acuerdo con información del medio local ‘El Mundo’, el hombre, de 37 años, intentó escapar por una de las salidas de emergencia. Sin embargo, no logró evadir a los uniformados, por lo que fue detenido .
Según indagaron las autoridades, no sería la primera vez que eso sucedía . Una trabajadora del club nocturno les comentó que con frecuencia asistía al lugar y dejaba al niño dentro del vehículo por varias horas .
Tras analizar las cámaras de seguridad, se supo también que ese día de la captura había llegado hacia las 8 de la noche al distrito San Blas, de la ciudad de Madrid. Su hijo ya completaba más de cuatro horas esperando y, además, con la posibilidad de salir del carro, pues este no tenía seguro.
“El hecho de dejar la puerta abierta aumenta los peligros a los que estaba expuesto el menor, porque podría haber salido en una zona en la que circulan coches, escaparse”, enfatizó una fuente policial al medio ‘El País’.
El sujeto fue puesto a disposición de un juzgado para que responda por el delito de abandono temporal de menor . Como señala el Código Penal de España, tal conducta puede ser castigada con una pena en prisión de 18 meses a tres años .
“Se impondrá la pena de prisión de dos a cuatro años cuando por las circunstancias del abandono se haya puesto en concreto peligro la vida, salud, integridad física o libertad sexual del menor de edad”, se lee en el artículo 229 del Código.
Se espera que se realice el juicio para ver si se le condena o no. Por lo pronto, se sabe que no posee antecedentes.
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