Beirut.- El grupo chiita libanés Hezbolá anunció este domingo que su ataque de represalia contra Israel "ha sido completado y logrado por hoy", después de que lanzara más de 320 cohetes y drones contra territorio israelí en respuesta al asesinato de su máximo comandante militar, Fuad Shukr, en julio en Beirut.
"Nuestra operaciones militar de hoy ha sido completada y lograda, alabado sea Dios Todopoderoso", dijo Hezbolá en un comunicado en el que indicó que los drones de asalto cruzaron la divisoria "hacia los objetivos previstos" en Israel y "desde múltiples caminos".
Por otra parte, la formación aliada de Irán negó que los bombardeos "preventivos" efectuados por Israel contra varios sitios de lanzamiento de Hezbolá en el sur del Líbano interrumpieran el ataque de represalia.
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Asimismo, el comunicado anunció que el líder del Hezbolá, Hasán Nasrala, ofrecerá un discurso sobre el impacto de la respuesta a la muerte de Shukr y para refutar las "afirmaciones vacías" del Ejército israelí sobre la eficacia de sus bombardeos preventivos.
El portavoz del Ejército israelí, Daniel Hagari, afirmó que la Fuerza Aérea utilizó unos cien aviones de combate para atacar miles de lanzacohetes de Hezbolá en el Líbano que apuntaban al norte y al centro de Israel, con el objetivo de "frustrar un inminente ataque masivo" del grupo armado.
Hezbolá lanzó este domingo su "respuesta inicial" a la muerte de Shukr, asesinado a finales de julio en un bombardeo israelí a las afueras de Beirut en el que perecieron otras seis personas.
El ataque de hoy, según la agrupación, consistió en el lanzamiento de más de 320 cohetes Katyisha contra un total de 11 cuarteles y emplazamientos militares de Israel para "facilitar el paso de drones de ataque hacia sus objetivos previstos en las profundidades" del Estado judío.
El grupo chiita libanés prometió responder con un ataque a gran escala contra Israel en represalia por el asesinato Shukr, que falleció pocas horas antes de otro ataque atribuido a Israel matara al jefe político de Hamás, Ismail Haniyeh, en Teherán.
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