Las autoridades de Lund , Suecia , han encontrado una solución ecológica para disuadir las reuniones sociales en el parque central de ese pueblo: tirar heces de pollo sobre el pasto.
La determinación se tomó de cara a la Noche de Walpurgis , una de las más importantes celebraciones del año en muchos países del norte y centro de Europa .
Valborg, como también se conoce a la noche del 30 de abril, es motivo de danzas, coros a voces, enormes hogueras y fuegos artificiales, cuando en situaciones normales, decenas de miles de personas salen de sus casas para celebrar.
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El excremento de pollo funciona como fertilizante para el césped y los árboles del parque central de Lund , y -los funcionarios confían- espantará a las personas por su olor.
"No queremos que Lund se convierta en un epicentro de contagio de Covid-19 . El estiércol de pollo tiene dos efectos. El primero es que tiene olor, así que no será particularmente agradable venir a sentarse en el pasto. Pero además es bueno para el suelo y para el parque porque contiene mucho nitrógeno y fósforo así que estamos aprovechando la oportunidad para hacer mantenimiento", declaró el presidente del concejo municipal Philip Sandberg.
Suecia
está llevando una estrategia distinta a la mayoría de los países frente a la pandemia. El gobierno sueco no dispuso para sus ciudadanos la obligación de mantener distanciamiento social, pero lo recomienda y toma acciones disuasorias como la citada.
Hasta el día de ayer, en el país nórdico se habían contabilizado 21 mil 92 casos totales de coronavirus y 2 mil 586 muertes por Covid-19 .
agv