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Al menos un muerto, ciudades devastadas, cientos de miles de personas sin electricidad y la amenaza de nuevas inundaciones ha dejado Harvey, degradado ayer a tormenta tropical, en la costa este del estado de Texas.
El presidente Donald Trump declaró que la prioridad es “salvar vidas”, tras una reunión de gabinete para analizar la situación.
El deceso se registró en la ciudad de Rockport, en el Golfo de México, confirmó el alcalde Charles Wax, en conferencia de prensa. De acuerdo con CNN, la muerte se produjo en el marco de un incendio. Otras 10 personas resultaron heridas por el derrumbe del techo de un complejo de viviendas, indicó Weather Channel.
Wax explicó que cerca de 40% de los residentes de Rockport no obedeció la evacuación obligatoria declarada por las autoridades ante la llegada de Harvey, que dejó sin suministro eléctrico a unas 300 mil personas.
Un 25% de la producción petrolera estadounidense en el Golfo de México se vio afectada debido a la tormenta, que afectó alrededor de 26% de la producción de gas natural en la zona. Unas 112 plataformas han sido evacuadas en la zona hasta el momento —casi 15% de las que operan—.
El centro de la tormenta se movió a 95 kilómetros al sureste de la ciudad de San Antonio, con vientos máximos de 110 kilómetros por hora, informó el Centro Nacional de Huracanes (CNH), que advirtió que el peligro no cesa para este estado, que sufre “inundaciones catastróficas” que suponen “riesgo mortal”. Se mantiene activo un aviso de tormenta tropical para la franja que va desde Baffin Bay hasta High Island, en Texas, así como un aviso de marejada ciclónica, con su correspondiente aumento del nivel del mar que inundará zonas costeras, desde Port Aransas hasta High Island.
Cerca de mil 300 efectivos militares fueron asignados a las tareas de rescate y asistencia, informó el gobernador de Texas, Greg Abbott en conferencia de prensa en Austin.
Harvey tocó tierra la noche del viernes, 50 kilómetros al noreste de la localidad de Corpus Christi, como huracán de categoría 4 —el primero en 12 años de esa envergadura—. Por el momento se desconoce el alcance de los daños causados por el fenómeno, indicó CNN, pero es de esperar que algunas zonas “estén inhabitables durante semanas o meses”, citó la emisora a expertos. Según Abbott, se han declarado 50 condados como área de desastre.
“Nuestra principal preocupación sigue siendo” la posibilidad de precipitaciones que causen “dramáticas inundaciones”, advirtió.
Abbott explicó que el ciclón dejó inundaciones de hasta medio metro de altura en la ciudad costera de Corpus Christi y concentraciones de hasta 40 centímetros de altura en Houston, zonas ya saturadas por el agua y que podrían llegar a registrar inundaciones de 1.3 metros de altura.
Entre las ciudades con mayor riesgo de inundaciones está justo Houston, la cuarta más grande de Estados Unidos, con una población de 2 millones de personas y donde las autoridades activaron la alerta por tornados e inundaciones ante la posibilidad de que las lluvias desborden los ríos que atraviesan la urbe. Harvey es el primer desastre natural de grandes proporciones que enfrenta la administración Trump, quien declaró a la región oficialmente como zona de catástrofe para poder liberar fondos de asistencia.