El príncipe Harry y Meghan, los duques de Sussex, exigieron que una agencia de fotografía entregue las imágenes tomadas durante lo que la pareja real dijo que fue una persecución "casi catastrófica" con los paparazzi.

Backgrid, una agencia de imágenes de entretenimiento con sede en California, dijo el jueves que rechazó la solicitud, que se presentó en una carta del equipo legal de los Sussex, exigiendo que proporcione las imágenes tomadas en la ciudad de Nueva York.

Backgrid indicó a la BBC que la carta decía: “Por la presente exigimos que Backgrid nos proporcione de inmediato copias de todas las fotos, videos y/o películas tomadas anoche por los fotógrafos independientes después de que la pareja se fue del evento y durante las próximas horas”.

La agencia le dijo a la emisora ​​​​que había respondido: “En Estados Unidos, como estoy seguro de que sabe, la propiedad pertenece al dueño de la misma: los terceros no pueden simplemente exigir que se les dé, como quizás pueden hacer los reyes.

“Tal vez debería sentarse con su cliente y decirle que sus reglas inglesas de prerrogativa real para exigir que la ciudadanía entregue sus propiedades a la corona fueron rechazadas por este país hace mucho tiempo.

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El primer ministro del Reino Unido, Rishi Sunak, fue consultado sobre el incidente durante una entrevista con la BBC en Japón, donde asiste a la cumbre del G7. Cuando se le preguntó si simpatizaba con una posible invasión de la privacidad o la seguridad, Sunak dijo: “Creo que, al igual que todos nosotros, queremos asegurarnos de que llevamos a cabo nuestra vida cotidiana con seguridad y protección.

El príncipe Enrique y su esposa Meghan Markle sufrieron la noche del martes en Nueva York una "persecución automovilística casi catastrófica" en la que participaron paparazzi dijo el miércoles un portavoz de la pareja.

El incidente ocurrió después de que Enrique y Meghan asistieran a una entrega de premios en la capital financiera de Estados Unidos. La madre de Meghan, Doria Ragland, estaba con ellos en el vehículo, dijo el portavoz en un comunicado enviado por correo electrónico a AFP.

El relato llevó al alcalde de la ciudad de Nueva York, Eric Adams, a condenar a los paparazzi que los perseguían como “imprudentes e irresponsables”. La policía dijo que la persecución fue relativamente corta, de unos 20 minutos, y no provocó heridos, choques ni arrestos, y no justificaba más investigaciones.

El taxista que los llevó desde la estación de policía indicó que reconoció instantáneamente a sus pasajeros y que los paparazzi “nos estuvieron siguiendo todo el tiempo”, aunque dijo que no lo llamaría una persecución.

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