Jerusalén.— La población de Gaza vivió ayer el primer día del Ramadán, mes sagrado de los musulmanes, bajo los bombardeos y acechada por el hambre que asola el territorio palestino tras más de cinco meses de guerra entre Israel y Hamas, sin tregua a la vista.
El secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, llamó a “silenciar las armas” en Gaza y a liberar a los rehenes cautivos desde el inicio de la guerra el 7 de octubre “para honrar el espíritu del Ramadán”.
Los bombardeos israelíes en varios puntos del territorio palestino —en particular Ciudad de Gaza, en el norte, Khan Yunis y Rafah, en el sur—, dejaron 67 muertos en las últimas 24 horas según el Ministerio de Salud de Gaza, donde Hamás gobierna desde 2007. “El inicio del Ramadán está cubierto de oscuridad, con sabor a sangre y hedor por todas partes”, dijo Awni al Kayyal, un desplazado en Rafah. “No tendremos comida en la mesa” tras la ruptura del ayuno el lunes por la noche, añadió el hombre de 50 años.
“La crisis de desnutrición en Gaza se acelera a un ritmo sin precedentes ante la alarmante escasez de comida, agua y servicios de salud”, denunció el Programa Mundial de Alimentos (PMA). Según el Ministerio de Salud de Hamas, 25 personas, entre ellos 21 niños, murieron por desnutrición y deshidratación en los hospitales de Gaza desde el inicio de la guerra, hace cinco meses, tras el ataque de comandos de Hamas en suelo israelí, en el que murieron unas mil 160 personas, según un recuento de AFP.
Además, unas 250 personas fueron secuestradas y 130 siguen cautivas en Gaza, de las que 31 habrían fallecido, según las autoridades israelíes. En respuesta, Israel prometió “aniquilar” a Hamas y lanzó una campaña militar que ha dejado de momento 31 mil 112 muertos en Gaza, en su mayoría civiles, según Hamas.
Para intentar paliar la crisis humanitaria, un primer barco fletado por la ONG española Open Arms y cargado con 200 toneladas de víveres, está listo para zarpar de Chipre hacia la Franja de Gaza , en el contexto de un corredor marítimo anunciado por la Unión Europea.
Paralelamente, un buque militar estadounidense partió el sábado de Estados Unidos con el equipamiento necesario para construir un embarcadero para descargar la ayuda, lo que podría tardar hasta 60 días.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, reafirmó ayer su intención de derrotar a Hamas, pese a las advertencias internacionales contra una anunciada ofensiva terrestre sobre Rafah. “Estamos en camino hacia la victoria total”, declaró en video. Las fuerzas israelíes aseguraron haber lanzado un ataque aéreo en la Franja de Gaza contra el número dos de Hamas. “La base era utilizada por dos altos cargos de la organización”, entre ellos Marwan Issa, número dos de las Brigadas Ezedín al Qassam. Issa es el lugarteniente de Mohammed Deif y uno de los planificadores de la masacre del 7 de octubre, según Israel, que intenta verificar si Issa murió.
Las tropas israelíes también lanzaron un ataque en el este de Líbano contra un bastión de Hezbolá, un movimiento islamista aliado de Hamas, que dejó al menos un muerto. Hamas exige un cese el fuego definitivo y la retirada de tropas israelíes, antes de cualquier acuerdo sobre la liberación de los rehenes retenidos en Gaza. Israel se niega.