“Es una vulgar persecución política”. Así califica Juan Guaidó la inhabilitación que por 15 años le dio el gobierno de Nicolás Maduro, a través del contralor general Elvis Amoroso, para que no pueda ejercer cargos públicos.
El proclamado presidente interino de Venezuela dice en entrevista con EL UNIVERSAL que “el contralor no tiene las facultades para inhabilitar a un funcionario, porque así lo marca nuestra Constitución; lo que existe es una persecución política en todos los niveles, es para desviar la atención de lo que realmente está pasando en Venezuela. Se trata de una vulgar persecución política, para que la opinión pública internacional se confunda, él no tiene las facultades ni el respaldo para hacer esto, así que esta inhabilitación no procede”.
Según Guaidó, quien se proclamó presidente el pasado 23 de enero y es reconocido por más de 50 países, “el régimen de Maduro quiere inhabilitar porque vamos rumbo a elecciones libres, a una verdadera democracia. Maduro se burla de una posible solución en Venezuela, así como secuestra, como pasó con Roberto Marrero [jefe del despacho de Guaidó, detenido el 21 de marzo], que no lo he podido ver, sólo sus abogados”.
Guaidó, concentrado en un plan definitivo para que cese lo que llama “usurpación” del poder por parte del presidente Nicolás Maduro, comenta: “Operación libertad, es un proceso de organización ciudadana, entendiendo la urgencia que hay en el país, la gran crisis humanitaria; es organizar todos los estados, movilizar a la población ciudadana, es un plan de organización y movilización, para ejercer presión y protestas por reivindicación al pueblo de Venezuela.
Sobre la ayuda humanitaria que se recaudó y que no pudo entrar a Venezuela el pasado 23 de febrero, Guaidó no lo ve como un fracaso: “Más bien se considera una tragedia; la ayuda es para salvar vidas, que hayan quemado de manera vil, comida, medicinas, que hayan obstaculizado puentes, etcétera, para que ésta no llegara, se considera una verdadera tragedia. Pero ésta [la ayuda] tiene que llegar a como dé lugar, se están perdiendo vidas por desnutrición, hay enfermos con tratamientos específicos, que requieren medicamentos controlados, y los necesitan con urgencia. Con los apagones de luz que provocaron, esto ha afectado aún más gravemente la crisis que tiene el país. Sin energía eléctrica no hay servicios de importancia, como el tener agua, que esto no es nuevo”.
Maduro ha dicho que detrás de los apagones hay “actos de sabotaje”, a lo que Guaidó responde: “Maduro siempre buscará culpables, cuando él es el verdadero responsable de todo lo que ha pasado en el país. Así que estamos viendo más vías, opciones adecuadas, estamos hablando con la Iglesia católica, con la Organización de los Estados Americanos (OEA), con más organizaciones, seguir insistiendo para recibir la ayuda humanitaria”.
Respecto del apoyo humanitario que el presidente Maduro supuestamente recibió de Rusia, Guaidó dice que “el Kremlin desmintió a Maduro. El gobierno de Maduro había comprado insumos médicos que enviaron en avión, es dar a conocer la crisis que ellos generaron, su fracaso como gobierno”. La situación por la que Venezuela llegó a esta crisis, subraya, “no fue producto de un desastre natural, sino producto de la corrupción, del mal manejo de recursos públicos, la inutilidad de un régimen, siguen manipulando a la opinión pública, no es otra cosa que el reconocimiento de su total fracaso”.
Según el líder opositor, la presencia de militares rusos en el país busca hacer ver que Maduro tiene un respaldo internacional, “cuando no es así, está aislado, está solo, porque países de América, el Grupo de Lima, países de Europa, Japón, Marruecos, Israel, Corea del Sur, Australia y los que se sumen nos han reconocido como gobierno legítimo; él mismo ha puesto en evidencia los pocos partidarios, el poco respaldo que tiene, cuando él tiene que pagar por adelantado una factura, y me refiero a la asistencia técnica de armamento que le había comprado a Rusia, eso es lo que significa la presencia de militares rusos en Venezuela”.
El presidente de la Asamblea Nacional reconoce que los venezolanos se pueden cansar de las marchas y manifestaciones, si no hay los resultados esperados: “Tenemos 20 años luchando y en los últimos cinco de manera muy intensa, claro que hay un desgaste de una población que está cansada de tanta corrupción y autoritarismo, 15% de población que emigró a otros países; sí es un desgaste, pero nuestra meta es ver a Venezuela libre de la usurpación que tanto daño le ha hecho.
“Todas las opciones necesarias se han contemplado para ponerle un ‘basta’, un ‘hasta aquí’ a este gobierno que mata, que amedrenta, que secuestra, y seguimos llamando a países que no nos han reconocido, que volteen a ver a Venezuela, nadie puede cerrar los ojos a un país que grita pidiendo ayuda urgentemente.
“Por ejemplo, México que fue ejemplo de democracia el pasado 1 de julio. El Presidente de México sabe lo que es luchar por una verdadera democracia: ¿por qué no alzar la voz por un país que está sufriendo consecuencias de regímenes autoritarios?”.