Gökmen Tanis (1981) es un turco nacido en la provincia de Yozgat, ubicada en el norte del país de Medio Oriente; tiene dos hermanos mayores y sus padres están separados.
Tanis, de 37 años, disparó en un tranvía y en otros sitios de Utrecht, ciudad holandesa, asesinando a tres personas y dejando heridas a cinco más. Su historial delictivo está repleto de cargos que lo perfilan como un criminal común: robos con agravante, acoso sexual y ataques a la autoridad, entre otros.
Se sabe, por una fuente judicial, que en 2012 el turco fue juzgado por robo a un camión en la provincia holandesa de Brabante; en 2013, por intento de homicidio; en mayo de 2014, por robo en la ciudad en la que llevó el ataque, y en julio de 2017 compareció ante un tribunal por la presunta agresión sexual contra una mujer.
“En algún momento él se perdió en el camino. Se drogaba con cocaína y heroína, y con frecuencia entró en contacto con la policía. La historia cuenta que se vengó de su exesposa o exnovia en el tranvía. Anteriormente [ella] lo había denunciado por violación”, dijo un residente que conoció a Tanis de joven, según el diario El Comercio. El padre del sospechoso Mehmet Tanis dijo a la prensa turca DHA que si su hijo resulta responsable de los actos que se le atribuyen, “debe ser castigado”.