San José. – El viaje político de varios de los principales jerarcas del gobierno izquierdista que asumió ayer en Chile podría describirse así: de las aulas a las multitudinarias protestas en las calles y de las calles a los estrados del poder.
Gabriel Boric, Camila Vallejo, Giorgio Jackson y Jeannette Jara transitaron del liderazgo estudiantil universitario hacia los puestos cruciales del gobierno que inició ayer un mandato de cuatro años con una gigantesca carga de expectativa nacional e internacional. Boric, Vallejo y Jackson fueron parte de los rostros visibles en la conducción de las movilizaciones de estudiantes universitarios y de secundaria en 2011 y 2012 para exigir educación gratuita y otras demandas sobre el aparato educativo.
Boric como presidente, Vallejo como ministra secretaria general de gobierno, Jackson como ministro secretario general de la Presidencia, y Jara como ministra de Trabajo y Previsión Social, proceden de los recintos de estudio de algunas de los principales centros de educación superior de Chile.
Boric fue presidente, de diciembre de 2011 a noviembre de 2012, de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile, financiada con fondos públicos. En 2014 se convirtió en diputado independiente y luego encabezó el izquierdista Frente Amplio, coalición partidaria que encabeza, y se reeligió para la etapa de 2018 a 2022. Tiene 36 años.
Vallejo le precedió en ese puesto, como presidenta de noviembre de 2010 a noviembre de 2011 y como vicepresidenta en el periodo de la jefatura de Boric. Como diputada, ejerció en dos etapas, de 2014 a 2022 por el Partido Comunista de Chile (PCCh), que integra Apruebo Dignidad, la alianza partidista que llevó a Boric a la presidencia. Tiene 33.
Jackson fue presidente, en 2010 y 2011, de la Pontificia Universidad Católica de Chile, una institución que se financia con recursos privados. De 2014 a 2022 fue diputado en dos periodos consecutivos por el izquierdista partido Revolución Democrática que se alió en 2017 con el Frente Amplio. Tiene 35.
Jara fue presidenta, en 1997 y 1998, de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Santiago de Chile, que se sostiene con dineros públicos. Integrante del PCCh, fue subsecretaria de Previsión Social de Chile en el segundo gobierno de Michelle Bachelet (2014-2018). Tiene 47.
¿Qué significa el avance de estos y otros personajes connotados de la sociedad chilena a posiciones cruciales de decisión política gubernamental en Chile?
“El proceso chileno ha ido copando distintos espacios políticos”, afirmó la chilena Paulina Acevedo, coordinadora de Ciudadanía e Interculturalidad en el (no estatal) Observatorio Ciudadano de Chile.
“Uno de ellos es la llegada al poder de algunos de los principales líderes de lo que fueron los movimientos estudiantiles del 2011, como Boric, Vallejo y Jackson. Antes de llegar al gobierno ingresaron al Congreso Nacional. Todo esto es el avance de la movilización popular y social”, dijo Acevedo a EL UNIVERSAL.
“Chile lo que está viviendo es un proceso de transformación profunda que tampoco comenzó ayer. Viene también del estallido de 2019”, recordó, al mencionar las multitudinarias protestas callejeras que surgieron en octubre de ese año en protesta a un aumento de las tarifas del transporte que detonó un violento y masivo movimiento antigubernamental.
La crisis de 2019 abrió una fase de cambios internos por la que actualmente se está redactando una nueva constitución política.
En la trayectoria de Boric, Vallejo y Jackson hay otra coincidencia: el derechista Sebastián Piñera fue el presidente de Chile que enfrentó las protestas estudiantiles de 2011 y la revuelta social de 2019.
“Hay una paradoja. Piñera recibió en 2011 a Boric y a otros representantes de los estudiantes que pidieron educación gratuita y laica, nunca pensó que años más tarde tendría que entregarle a ese dirigente la banda presidencial”, destacó Acevedo.
Al insistir en que “no solo” se trata de Boric, indicó que “son pueblos que avanzan en la reconquista de los espacios de representación y de poder que fueron tomados por la derecha con Piñera”.
Según la activista, parte de la responsabilidad por la crisis recayó en la Concertación de Partidos por la Democracia, bloque de fuerzas de izquierda, centro izquierda y centro creado en 1988 y que, luego de la dictadura militar que gobernó en Chile de 1973 a 1990, ejerció el poder del 11 de marzo de 1990 al 11 de marzo de 2010 en cuatro administraciones.
“En Chile hubo una desidia y un abandono del Estado de los anteriores gobiernos democráticos que tampoco dieron el ancho para estar a la altura de lo que los pueblos exigen y demandan. Así llegamos a este momento de cambio. Chile está tardío en todos los mínimos democráticos, pero este proceso se aceleró a partir 2019”, alegó.