La Policía de frustró un ataque para asesinar al máximo dirigente del partido político FARC , Rodrigo Londoño , y abatió a dos hombres que pretendían cometer el atentado ordenado por antiguos jefes la desmovilizada guerrilla que decidieron regresar a la lucha armada, informó el domingo un alto oficial.

El plan se descubrió con base en la información suministrada a la policía por una persona que conocía los detalles para asesinar a Londoño, más conocido como " " por su antiguo nombre de guerra y quien al momento de la firma del acuerdo de paz en 2016 era el máximo comandante de la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).

"Se frustró una acción terrorista, una acción que pretendía cobrarle la vida al señor Rodrigo Londoño Echeverri, presidente del partido político FARC", dijo el director de la Policía Nacional, general Oscar Atehortúa, en una conferencia de prensa en la ciudad de Armenia.

El oficial reveló que los dos hombres encargados del ataque contra Londoño murieron el sábado en la tarde en una carretera entre los departamentos del Quindío y Valle del Cauca, cuando se desplazaban en una motocicleta y fueron interceptados por policías a los que se enfrentaron con armas de fuego.

Atehortúa aseguró que los dos hombres muertos estaban en la zona en donde permaneció en los últimos días Londoño, presidente de la Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común, el partido que mantuvo el mismo acrónimo de la guerrilla y que surgió del acuerdo de paz firmado para poner fin a un conflicto de más de medio siglo que ha dejado 260 mil muertos.

El oficial sostuvo que los dos sujetos habrían recibido instrucción militar en Venezuela por parte de Iván Márquez y Hernán Darío Velásquez, alias "El Paisa", antiguos comandantes de las FARC que anunciaron en agosto pasado su regreso a la lucha armada por considerar que se incumplió el acuerdo de paz.

Las disidencias de las FARC , lideradas por Márquez y Velásquez, entre otros, cuentan con unos 2 mil 500 combatientes, la mayoría de los cuales perteneció a la guerrilla, según fuentes de seguridad.

Uno de los hombres muertos en la acción policial que permitió frustrar el atentado contra Londoño, pertenecía a una unidad gubernamental encargada de proteger a altos funcionarios del Estado y a los antiguos dirigentes de la guerrilla que actualmente desempeñan actividades políticas, dijo el oficial.

El acuerdo de paz que permitió la entrega de armas y la reincorporación de unos 13 mil excombatientes, otorgó a las FARC cinco asientos en el Senado y cinco más en la Cámara de Representantes por dos periodos legislativos que vencen en 2026.

De inmediato no hubo ninguna reacción de Londoño, de 60 años, ni del partido político FARC. De acuerdo con las Naciones Unidas, 173 exintegrantes del desmovilizado grupo guerrillero han sido asesinados desde la firma del acuerdo de paz.

lsm

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