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París.— La Fiscalía de París abrió ayer una investigación por los insultos antisemitas de los que fue víctima el filósofo y académico Alain Finkielkraut por parte de un grupo de personas que participaban el sábado por la tarde en una manifestación de los chalecos amarillos en París.
La Fiscalía precisó que se trata de un procedimiento por el delito de injurias públicas basadas en argumentos étnicos, de nacionalidad, raza o religión, y que se han encargado las pesquisas a la Brigada de Represión de la Delincuencia contra la Persona de la Policía.
El ministro del Interior, el francés Christophe Castaner, informó de que las fuerzas del orden han identificado a “un sospechoso” como principal autor de los ataques verbales, cuyo rostro es visible en los diferentes videos del incidente.
Finkielkraut, de 69 años, quien había expresado su apoyo al movimiento de los chalecos amarillos en sus inicios, antes de pasar a la crítica, dijo que estas protestas “son un poco como el Golem [un gigante mítico judío] que avanza rompiendo todo a su alrededor”.
Fuentes de la investigación citadas por el canal BFMTV señalaron que está fichado por los servicios secretos como integrista islámico, de tendencia salafista.
En los videos se escucha cómo varios manifestantes llaman a Finkielkraut, entre otras cosas, “asqueroso sionista de mierda” o “asqueroso racista de mierda”, y en particular ese hombre le dice: “Vas a morir, Dios va a castigarte. Irás al infierno”, al tiempo que afirma que “Francia somos nosotros”.
Para Finkielkraut, entrevistado por BFMTV, “es una frase extremadamente amenazante” sobre todo porque sale de la boca de un hombre de origen árabe que viene a decir que “somos el gran reemplazo y tú vas a ser el primero que lo va a pagar”.
El filósofo insistió en que, en contra de lo que sostienen algunos, este ataque antisemita no es ilustrativo de un retorno del fascismo de los años 1930, que “está muerto”, sino que a los judíos se les reprocha ahora en primer lugar ser “racistas” por el comportamiento de Israel con los palestinos.
“El antisemitismo de hoy se ha convertido en un antirracismo” y hay algunos intelectuales, sobre todo en la izquierda radical, que “hacen llamamientos al odio”, dijo.
“Hay una fracción mínima, pero muy activa, que practica la incitación al odio antirracista contra los judíos”, argumentó.
Sobre si denunciará los hechos, dijo que “no va con mi temperamento. No estoy aquí para castigar, sino para entender”.
La agresión verbal contra Finkielkraut generó desde el sábado reacciones de condena en la clase política, empezando por el presidente francés, Emmanuel Macron, quien en Twitter escribió: “Las injurias antisemitas de las que ha sido objeto son la negación absoluta de lo que somos y de lo que hace de nosotros una gran nación. No las toleraremos”.
Ante varios actos antisemitas en los últimos días, 14 partidos han convocado a manifestaciones en todo el país para el martes.
La policía reportó que los ataques antisemitas se han incrementado un 74% durante un año.
