WEST PALM BEACH, Florida.- Donald Trump fue blanco este domingo 15 de septiembre de lo que según el FBI “parece ser un intento de asesinato” en su club de golf en West Palm Beach, Florida, apenas nueve semanas después de que el candidato presidencial republicano sobreviviera a otro atentado contra su vida. El expresidente dijo que estaba a salvo y bien, y las autoridades detuvieron a un hombre.
Agentes del Servicio Secreto de Estados Unidos, apostados unos hoyos más arriba de donde jugaba Trump, observaron la boca del cañón de un fusil tipo AK-47 asomando entre los arbustos que bordean el campo, a unos 365 metros de distancia.
Un agente disparó y el agresor soltó el fusil y huyó en una camioneta SUV, dejando atrás el arma de fuego junto con dos mochilas, una mira telescópica utilizada para apuntar y una cámara GoPro, dijo el jefe policial del condado Palm Beach, Ric Bradshaw. El hombre fue detenido más tarde en un condado vecino.
El Buró Federal de Investigaciones (FBI) señaló haber respondido al incidente y adelantó que "está investigando lo que parece ser un intento de asesinato del expresidente Trump"
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Donald Trump en un comunicado de prensa, detalló que "hubo disparos cerca de mí, pero antes de que los rumores comiencen a salirse de control, quiero que escuches esto primero: ¡ESTOY A SALVO Y BIEN!".
Durante el ataque, el responsable huyó, sin embargo, momentos más tarde fue detenido e identificado como Ryan Wesley Routh quien supuestamente armado con un rifle de asalto fuera del Trump International Golf Club mientras Trump jugaba el quinto hoyo el domingo por la tarde.
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