México y la Liga Antidifamación firmaron ayer, aquí, un acuerdo que permitirá asistir a mexicanos víctimas de discriminación, acoso y crímenes de odio en Estados Unidos.
En la primera fase, la Liga enviará a expertos a los 50 consulados mexicanos en Estados Unidos para formar a funcionarios en el manejo de casos de discriminación, así como en la identificación y reporte de crímenes de odio.
La Cancillería y la Liga, fundada hace más de un siglo para combatir el antisemitismo, también trabajarán juntas para reunir datos sobre casos de mexicanos que son discriminados y harán una campaña para llamar la atención sobre este creciente problema.
“Esta es una colaboración ganadora para ambas partes que ayuda a expandir nuestro trabajo sobre la discriminación y ayudar a comunidades vulnerables que lo necesitan”, dijo Jonathan Greenblatt, presidente de la Liga Antidifamación.
“Estamos preocupados por la retórica y los sentimientos antiinmigrantes y antimexicanos”, dijo el secretario de Relaciones Exteriores de México, Luis Videgaray, al congratularse del acuerdo a través de un comunicado. El canciller canceló su agenda de ayer tras enterarse del terremoto que sacudió el centro de México.
Esperamos que la colaboración con la Liga sirva “para que haya mucha más tolerancia en Estados Unidos” hacia los mexicanos, sostuvo por su lado Carlos Sada, subsecretario mexicano para América del Norte, presente en la ceremonia. Desde la elección de Donald Trump a la Casa Blanca en noviembre pasado han aumentado los crímenes de odio en Estados Unidos.
La fiscalía de Nueva York, donde las denuncias de crímenes de odio o episodios de discriminación por raza, religión, origen u orientación sexual crecieron 30% en 2016, sobre todo contra latinos, musulmanes, judíos, negros, asiáticos y la comunidad LGBT, lanzó recientemente una campaña destinada a alentar a víctimas y testigos de crímenes raciales a denunciar los incidentes.
La alcaldía de Nueva York ha incluso dado ejemplos: una mujer con acento hispano llamó recientemente por teléfono a una empresa a obtener un servicio y esta fue la respuesta: “Estoy harta de estos mexicanos estúpidos. ¡Trump tiene razón de querer sacarlos a todos! Son una pila de basura”. Trump busca construir un muro en la frontera con México y deportar a millones de inmigrantes indocumentados de EU, en su mayoría mexicanos y centroamericanos. Durante su campaña, tildó a los mexicanos de traficantes de droga, violadores y criminales.