Washington.— Las autoridades reguladoras de Estados Unidos aprobaron ayer extender los refuerzos contra el Covid-19 a quienes recibieron la vacuna de Moderna o de Johnson & Johnson, y dijeron que cualquiera que sea elegible para una dosis adicional puede recibirla de una marca distinta a la que se le administró en un principio.
Las decisiones de la Administración de Medicamentos y Alimentos (FDA, por sus siglas en inglés) representan un gran paso para ampliar la campaña de refuerzos en Estados Unidos, la cual comenzó con dosis adicionales de la vacuna de Pfizer el mes pasado. Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus iniciales en inglés) consultarán con un panel de expertos el jueves antes de concluir las recomendaciones oficiales sobre quién debería recibir refuerzos y cuándo.
Específicamente, la FDA autorizó una tercera inyección de Moderna para adultos mayores y otras personas que corren alto riesgo de contagio de Covid-19 debido a sus problemas de salud, su empleo o las condiciones en las que viven, la cual se administraría seis meses después de su última inyección. Habrá un cambio importante: el refuerzo de Moderna será de la mitad de la dosis utilizada en las dos primeras, basándose en datos de la compañía de que esa cantidad es más que suficiente para incrementar de nuevo la inmunidad.
En cuanto a la vacuna de J&J, la FDA declaró que todos los que la recibieron, sin importar su edad, deberían aplicarse una segunda dosis al menos dos meses después de la vacunación inicial.
Mientras, la Organización Panamericana de la Salud (OPS) advirtió que restringir el acceso a los países de viajeros debido al tipo de vacuna que recibieron contra el Covid-19 puede prestarse “a discriminación”.