Naciones Unidas.— Tres proyectos de resolución que buscaban crear un mecanismo para que se investigue el presunto ataque químico en la ciudad siria de Duma fracasaron ayer en el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas.
Primero, Rusia vetó durante la sesión del Consejo en Nueva York un proyecto de resolución de Estados Unidos que buscaba establecer responsabilidad sobre el presunto ataque químico en Siria, para lo cual hablaba de la creación de un equipo de investigación independiente. Bolivia también votó en contra de la resolución impulsada por Washington, mientras que China se abstuvo.
Posteriormente, EU y Reino Unido sufragaron contra una iniciativa de resolución rusa que señalaba que en principio no existe evidencia de un ataque químico en Duma y que sólo recibió seis votos a favor, siete en contra y dos abstenciones, lo que impidió su adopción.
El proyecto de EU era similar al que ya había sido establecido por el Consejo de Seguridad. Ese mecanismo de investigación anterior, compuesto por la ONU y la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ), había concluido en un análisis difundido el año pasado que la mayoría de los 85 ataques con armas químicas registrados en Siria habían sido perpetrados por fuerzas del gobierno. Rusia, principal aliado del presidente sirio Bashar al-Assad, bloqueó en noviembre pasado la continuación de este mecanismo de investigación.
Tras una breve interrupción de la sesión, fracasó la tercera propuesta de resolución, en la que Rusia quería pedir que la Organización para la Prohibición de Armas Químicas (OPAQ) encabezara las investigaciones de los sucesos en Duma.
El secretario general de la ONU, António Guterres, apoyó un mecanismo de investigación que identifique a los responsables del reciente ataque químico en Siria, a fin de que rindan cuentas. “Apelo al Consejo de Seguridad para que cumpla con su responsabilidad y encuentre la unidad en este tema. También exhorto al Consejo a redoblar sus esfuerzos para llegar a un acuerdo sobre un mecanismo específico para la rendición de cuentas”, pidió el titular de la ONU.
Por su parte, la OPAQ informó que enviaría una misión de investigación a Duma a fin de determinar lo sucedido, aunque sin señalar responsables, y como una invitación del gobierno de Siria. La OPAQ no detalló cuándo arribarían los investigadores a Duma. Tanto el Consejo de Seguridad como la OPAQ parecen operar bajo una carrera contra el tiempo, luego de que el presidente Donald Trump amagara el lunes con tomar medidas en un plazo de 48 horas en torno al supuesto ataque con armas químicas en Duma que según lo que señaló ayer la portavoz del Departamento de Estado, Heather Nauert, dejó al menos 85 muertos. La ONU habla de 49 víctimas mortales.
Analistas esperan que, como hiciera el año pasado tras otro ataque con armas químicas, Trump lance una ofensiva militar contra activos militares del gobierno sirio. El estadounidense habló ayer con la primera ministra británica, Theresa May, con quien acordó “no permitir que continúe el uso de armas químicas”.
Trump está tratando de coordinar una respuesta internacional a este hecho y en los últimos días se puso en contacto con el presidente francés, Emmanuel Macron.
Macron dijo ayer mismo que “en los próximos días” decidirá, junto a Reino Unido y EU, si se produce un ataque en suelo sirio, pero subrayó que en caso afirmativo, irán dirigidos sólo contra las “capacidades químicas” de Al-Assad. Así lo indicó en rueda de prensa conjunta en París con el príncipe heredero de Arabia Saudita, Mohamed bin Salman. Éste dijo que su país respondería “presente” si se le pide apoyar los ataques en Siria.