Travis Clark es el nombre del exsacerdote católico de Louisiana, Estados Unidos, que fue destituido y encarcelado después de haber sido capturado infraganti por un ciudadano mientras mantenía relaciones sexuales con dos mujeres en el altar de una iglesia .
Cuando la Policía llegó, el hombre de 39 años estaba grabándose con dos dominatrices en lo que parecía ser un set improvisado. A su alrededor había luces, un
celular que apuntaba hacia la mesa en la que generalmente se realizan ritos sagrados y varios juguetes sexuales.
Foto: Página oficial de la Oficina del Sheriff de la Parroquia de St. Tammany
La denuncia la hizo un transeúnte que pasaba por allí la noche del 30 de septiembre de 2020. Según lo que le relató a la Policía, al ver las luces del recinto encendidas, se acercó para ver lo que estaba sucediendo. Fue entonces cuando vio al líder de la comunidad semidesnudo junto a las otras dos mujeres.
El sacerdote fue arrestado porque estaba en un espacio abierto al público y rodeado de ventanas. A él y a las dos mujeres que lo acompañaban se les acusó de exhibicionismo.
Debido a la pandemia , el juicio se pudo llevar a cabo hasta el pasado 21 de noviembre de 2022, día en el cual Clark compareció en el juzgado de frente a la jueza Ellen Creel y se declaró culpable. Como consecuencia, recibió tres años de cárcel y adicionalmente deberá pagar una multa de mil dólares (19 mil 400 pesos mexicanos).
Foto: Página oficial de la Oficina del Sheriff de la Parroquia de St. Tammany
Las dos mujeres, identificadas como Mindy Dixon y Melissa Cheng, reconocieron el mismo cargo, pero, al argumentar que habían sido contratadas para 'juego de roles', solo recibieron dos años de libertad condicional.
Adicionalmente, según la página oficial de la arquidiócesis de Nueva Orleans, Clark deberá regresar a la corte el 20 de enero del 2023 para asegurarse de que el trío no haya publicado el video ni obtenido ganancias de ello.
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Una semana después del arresto, el arzobispo Gregory Aymond quemó el altar de la iglesia de San Pedro y San Pablo de Nueva Orleans bajo la premisa de que Clark había cometido un acto demoníaco.
Además, en un video publicado por él en la página de la arquidiócesis, dijo que este acto reprochable había violado su compromiso con el celibato y que, al profanar un elemento sagrado, se estaría dejando un espíritu maligno en el lugar.
Foto: Página oficial iglesia de los Santos Pedro y Pablo
“Su comportamiento obsceno fue deplorable. Su profanación del altar en la iglesia fue demoníaca. Estoy furioso por sus acciones”, dijo Aymond.
Por esto mismo el altar fue incinerado lo más pronto posible y, meses después, reemplazado por uno “limpio”.
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