Washington.— México y Estados Unidos están perfilando los últimos detalles para cerrar parcialmente la frontera que comparten, como medida para controlar la expansión del coronavirus en ambos países. La idea de los dos gobiernos es que no afecte a la actividad económica, una de las relaciones de intercambio comercial más importantes del mundo.
El canciller mexicano, Marcelo Ebrard, tuiteó que conversó con su par estadounidense, Mike Pompeo, en una llamada programada para tratar de encontrar soluciones conjuntas y coordinadas para atajar la crisis. “Le propuse que las medidas para evitar la propagación del Covid-19 no paralicen la actividad económica y la frontera continúe abierta al comercio y al trabajo. Encontré buena disposición. Mañana [por hoy, viernes] informaré detalle de avances”, expresó. El Departamento de Estado confirmó las pláticas “sobre la coordinación de un plan para restringir los viajes no esenciales a través de nuestra frontera compartida en respuesta a la pandemia del Covid-19”. De acuerdo con un comunicado de la portavoz diplomática estadounidense, Morgan Ortagus, ambos líderes hablaron “de la importancia de crear una estrategia norteamericana uniforme para reducir los riesgos de salud pública para nuestras comunidades y resolver de manera más eficaz y conjuntamente los crecientes desafíos”, sin alterar y “priorizando” el flujo comercial transfronterizo.
Más tarde, la Subsecretaría de Relaciones Exteriores para América del Norte lanzó una advertencia a los consulados mexicanos en la frontera de EU con México: “Hago referencia al posible cierre parcial de la frontera México-Estados Unidos como estrategia de comtención vía terrestre del Covid-19”, detalla un documento con carácter de urgente enviado a los consulados mexicanos y del que EL UNIVERSAL tiene copia.
Ya en la conferencia matinal de ayer, el presidente Andrés Manuel López Obrador insinuaba que se podía llevar a cabo un plan de ese calibre, al decir que en pláticas con Washington “se acordó tomar medidas conjuntas” para paliar los efectos del Covid-19.
La negociación es especialmente complicada dado el enorme grado de relaciones transfronterizas, el volumen de cruces diarios y el constante flujo comercia. La acción conjunta sería muy parecida a la que la Casa Blanca pactó con Canadá el miércoles y que, a la espera de los últimos ajustes, se espera que empiece a implementarse hoy, prohibiendo los cruces “no esenciales” (turismo y ocio, básicamente) y sin afectar el intercambio comercial. De concretarse, es un giro a la posición que Trump expresó el miércoles, cuando aseguró que no tenía intención de actuar sobre la frontera con México. “No cerramos, pero vamos a invocar una provisión concreta que nos permitirá mayor libertad sobre qué hacemos”, dijo. Con esa “provisión” se entendía que aplicaría una medida para expulsar de inmediato y sin debido proceso a solicitantes de asilo e inmigrantes indocumentados que cruzaran a territorio estadounidense, una idea que sigue sobre la mesa.
EU suma ya 14 mil 145 y 207 decesos, cifras que se multiplican exponencialmente a medida que se distribuyen y realizan tests por todo el país. Asimismo, elevó al máximo nivel su alerta de viajes, llamando a los ciudadanos a evitar cualquier viaje internacional y urgiendo a los estadounidenses que regresen al país. Por su parte, el gobernador de California, Gavin Newsom, emitió una orden de confinamiento obligatorio para los casi 40 millones de habitantes de la quinta economía mundial, entre ellos 4.1 millones mexicanos. Trump autorizó estudios clínicos para evaluar si la cloroquina, medicamento contra la malaria, o el remdesivir, usado en pacientes de ébola, puede ser eficaz contra el Covid-19.