Washington.— El gobierno de Estados Unidos designó a tres grupos delictivos mexicanos entre las cinco “máximas amenazas del crimen organizado transnacional”, y anunció la creación de un cuerpo especial.
El fiscal general de Estados Unidos, Jeff Sessions, identificó al Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), al de Sinaloa y al Clan del Golfo, junto con la pandilla Mara Salvatrucha MS-13 y el designado grupo terrorista Hezbolá, cuya actividad se centra principalmente en Líbano, como las principales amenazas en cuanto a crimen para su país.
“No podemos permitir que [los delincuentes] extiendan su influencia”, añadió el fiscal general.
La lista la crearon, entre otros, expertos del FBI, la DEA y la división criminal del Departamento de Justicia. Estos grupos son, según el gobierno de la Unión Americana, los principales causantes de las “amenazas para la seguridad y la prosperidad de Estados Unidos y sus aliados”.
El gobierno de Trump, en su objetivo de establecer la “ley y el orden” en su territorio, ha puesto su mira en las bandas criminales, especialmente las dedicadas al narcotráfico. “Son un flagelo”, dijo el vicefiscal Rod Rosenstein. “Necesitamos golpear a las organizaciones criminales transnacionales ahí donde están con todos los medios de los que disponemos”, añadió Rosenstein.
Por eso, el gobierno anunció la creación del Cuerpo Especial contra el Crimen Organizado Transnacional, un nuevo equipo que servirá para “redoblar los esfuerzos” contra esos grupos y que “sientan todo el peso del gobierno de Estados Unidos y sus aliados”.
En una de sus primeras órdenes como presidente, Donald Trump instruyó al Departamento de Justicia de que se asegurara que se daba “una alta prioridad y suficientes recursos” a las fuerzas de seguridad, de investigación y policiacas para “identificar, interrumpir y desmantelar” organizaciones criminales transnacionales.
Ante unos grupos “cada vez más inteligentes”, hábiles en el uso del sistema financiero y las tecnologías para cometer sus actividades ilícitas, el gobierno de EU decidió que debe aplicar estrategias en “múltiples frentes”.
La acción anunciada responde a esa orden y, según Sessions, “incrementará la efectividad” para “sacar de una vez por todas a estos criminales de nuestras calles”.
Rosenstein añadió que esperan “desmantelar sus estructuras de mando y control” y “cortar sus opciones de cometer ilícitos.
“Con este nuevo cuerpo especial, nuestros esfuerzos estarán más enfocados y serán más efectivos que nunca”, aseguró.
Cada organización criminal estará analizada y perseguida por un subcomité específico. El equipo contra el Cártel de Sinaloa estará basado en California; el del Golfo en Florida y el grupo contra el Cártel Jalisco Nueva Generación lo liderará un funcionario experto en narcotráfico de la sede central del Departamento de Justicia.
En los equipos de trabajo también cooperarán expertos y procuradores de otros países, incluidos mexicanos. Algunos estuvieron presentes en el acto que se celebró en Washington.
Según lo explicado, cada subcomité tendrá que presentar en 90 días un plan con “recomendaciones específicas” para desmantelar cada organización, ya sea a través de la persecución, enjuiciamiento, diplomacia o cualquier otra medida dentro de la legalidad.
“Con los consejos de estos profesionales experimentados, el Departamento [de Justicia] estará mejor preparado para seguir las órdenes del presidente y desmantelar el crimen organizado transnacional”, sentenció Sessions.