Washington.— La Corte Suprema respaldó ayer la autoridad que tiene el gobierno de Estados Unidos para detener a inmigrantes que esperan su deportación en cualquier momento después de cumplir condenas de prisión por delitos penales.
El máximo tribunal dictaminó por cinco votos a favor y cuatro en contra, que las autoridades federales pueden detener en cualquier momento y por un periodo indefinido a estos indocumentados.
El fallo, informado por el juez conservador Samuel Alito, deja abierta la posibilidad de que inmigrantes desafíen la ley federal si son detenidos mucho después de que hayan completado sus sentencias. El juez liberal Ste-phen Breyer cuestionó si el Congreso, cuando redactó la legislación, “tenía la intención de permitir que el gobierno detenga a las personas años después de su liberación de la cárcel”.
También ayer se informó que un grupo de solicitantes de asilo enviados a México cruzó la frontera para sus primeras audiencias en una corte de inmigración de EU, con la esperanza de quedarse en el país. Además, la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, por sus siglas en inglés) reveló que un migrante mexicano murió el lunes en un centro médico de El Paso, Texas, donde fue trasladado por las autoridades migratorias que lo detuvieron.