El Departamento de Justicia de Estados Unidos informó este miércoles que el gobierno de ese país busca confiscar los bienes, en México, adquiridos por Rafael Caro Quintero con recursos derivados del narcotráfico.
En un comunicado recordó que Caro Quintero, fundador del Cártel de Guadalajara y arrestado en 1985 en Costa Rica, está acusado en Nueva York de dirigir una empresa criminal y de conspirar para el asesinato del agente especial de la Agencia Antinarcóticos (DEA), Enrique “Kiki” Camarena.
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En México, estas son las propiedades que Estados Unidos quiere confiscar:
* Calle Paseo de Los Virreyes 3483, Lote 21, Manzana 41, Fraccionamiento Villa Universitaria, en Zapopan, Jalisco, a nombre de Héctor Rafael Caro Elenes, con usufructo de por vida para Rafael Caro Quintero y Elizabeth Elenes de Caro.
* La propiedad alguna vez conocida como “Rancho del Gorupo” , en Zapopan/Guadalajara, a nombre de Héctor Rafael, Roxana Elizabeth, Henoch Emilio y Mario Yibran, todos apodos de Caro Elenes, con usufructo de por vida para Rafael Caro Quintero y Elizabeth Elenes de Caro.
* Bodega 21, Fraccionamiento Mercado de Abastos Norte, Mercado del Campesino, Zapopan, Jalisco, a nombre de Héctor Rafael, Roxana Elizabeth, Henoch Emilio y Mario Yibran, todos apodos de Caro Elenes, con usufructo de por vida para Rafael Caro Quintero y Elizabeth Elenes De Caro
* Una fracción de la propiedad rústica localizada en Zapopan, Jalisco, conocida como “El Tigre”, “Nixticuilf” o “La Salitrera”, a nombre de Héctor Rafael, Roxana Elizabeth, Henoch Emilio y Mario Yibran, todos apodos de Caro Elenes, con usufructo de por vida para Rafael Caro Quintero y Elizabeth Elenes de Caro.
* La propiedad conocida como Condominio Sagitario, en calle Sagitario 5289-8 Fraccionamiento Residencial Arboledas, en Zapopan, Jalisco, a nombre de Roxana Elizabeth Caro Elenes.
* La propiedad conocida como Condominio Sagitario, en calle Sagitario 5289-9 Fraccionamiento Residencial Arboledas, en Zapopan, Jalisco, a nombre de Roxana Elizabeth Caro Elenes.
* La propiedad ubicada en Calle Luigi Pirandello 5397, Lote 29B, Manzana 145, Fraccionamiento Vallarta Universidad, en Zapopan, Jalisco, a nombre de Roxana Elizabeth Caro Elenes.
* La propiedad ubicada en Calle Enrique Gómez Carrillo 5313, Lote 4A, Manzana 157, Fraccionamiento Vallarta Universidad, en Zapopan, Jalisco, a nombre de Roxana Elizabeth Caro Elenes.
Al menos dos de las 8 propiedades que el gobierno de Estados Unidos busca confiscar a Rafael Caro Quintero en Jalisco, ya no le pertenecen, pues fueron fraccionados y vendidos.
El primero es el rancho El Gorupo , que se encuentra dentro de una propiedad pública adquirida hace más de un siglo por el Gobierno del estado como parte de un proyecto para preservar las reservas hídricas de Guadalajara.
Originalmente, el predio ubicado en lo que se conoce como Colomos III, en los límites entre Guadalajara y Zapopan, medía 3 hectáreas, pero a lo largo de los años, desde la década de los 60, sus propietarios lograron modificar escrituras para adueñarse de 30 hectáreas.
Desde 2017, el gobierno de Jalisco inició una batalla en tribunales contra las irregularidades cometidas por empresarios y notarios que “legalizaron” la invasión y permitieron que en 1984 Caro Quintero adquiriera 20 hectáreas; hasta ahora sólo se han logrado recuperar 12 hectáreas.
Tras la detención del narcotraficante, la entonces Procuraduría General de la República (PGR) decomisó sus bienes, pero en el 2000, después de un largo proceso legal, el sinaloense logró recuperar El Gorupo para fraccionarlo y vender varios predios donde actualmente se erigen lujosos desarrollos inmobiliarios.
Otra de las fincas de Caro Quintero que reclama la administración estadounidense ya no existe; se trata de la que se ubicaba en el número 5313 de la calle Enrique Gómez Carrillo, en el fraccionamiento Vallarta Universidad, una zona residencial lujosa.
Hasta 2013 se encontraba en ese domicilio una lujosa residencia con alberca que también tenía acceso por el número 5317, haciendo parecer dos fincas lo que en realidad era una; sin embargo, a finales de ese año la casa fue demolida y comenzó la construcción de un conjunto de edificios departamentales que en su mayoría ya están habitados.
***Con información de Raúl Torres.