La familia Alush estaba a punto de desayunar cuando un bombardeo israelí alcanzó su casa el domingo de madrugada en el norte de la Franja de Gaza, dejando cuerpos “destrozados”, cuenta uno de sus pocos allegados aún con vida.
Según la Defensa Civil Palestina, 13 niños murieron en el ataque contra una casa familiar que dejó “al menos” 25 muertos en Jabalia, una de las zonas más densamente pobladas del territorio palestino.
El edificio quedó completamente destruido y convertido en un montón de escombros, constató un corresponsal de AFP.
El bombardeo ocurrió alrededor de las 06:00, “un momento en que los habitantes aquí se despiertan y toman su desayuno”, dijo un miembro de la familia, Abdalá al Najar.
“Hubo una gran explosión al punto de que, cuando llegamos, todos los cuerpos estaban destrozados”, agregó.
Por su parte el ejército israelí aseguró haber atacado un sitio en una zona de Jabalia “donde operaban terroristas que representaban una amenaza” para sus tropas.
“Antes del ataque se tomaron numerosas medidas para reducir el riesgo de herir a civiles”, afirmó un portavoz militar.
El ejército israelí lleva a cabo desde el 6 de octubre una nueva ofensiva terrestre en el norte de la Franja de Gaza para impedir que los combatientes de Hamas recuperen el control.
La guerra fue desencadenada por el ataque perpetrado el 7 de octubre de 2023 por el movimiento islamista en territorio israelí.
Este ataque provocó la muerte de mil 206 personas en el lado israelí, en su mayoría civiles, según un recuento basado en cifras oficiales e incluyendo rehenes -llevados a Gaza el 7 de octubre de 2023- muertos o abatidos en cautiverio en la Franja de Gaza.
“La casa servía de refugio para la gente durante bombardeos intensos”, añadió Abdalá al Najar en el sitio del ataque del domingo. “No queda nadie, solo mi madre y yo”, lamenta.
A su alrededor voluntarios despejaban los escombros con las manos. Un peluche de ratón yacía entre las piedras.
Envueltos en sudarios blancos manchados de sangre, los cuerpos de las víctimas fueron transportados en una camioneta para ser enterrados en un cementerio de Jabalia.
“Niños, mujeres e inocentes son un blanco constante para el enemigo israelí”, comentó un vecino de la familia Alush, Mohamed al Barch.
Hamás condenó la “masacre” de Jabalia en un comunicado, afirmando que en la casa “había más de 50 civiles inocentes”.
La mayoría eran niños y mujeres, incluidas personas “desplazadas a la fuerza por la ocupación desde el campo de refugiados de Jabalia”, según el movimiento.
La Defensa Civil palestina también informó el domingo de otro ataque israelí sobre una casa en el barrio de Al Sabra en Gaza ciudad, también en el norte, que dejó cinco muertos y personas desaparecidas.
Desde el 7 de octubre más de 43 mil 600 palestinos han muerto en la campaña militar israelí de represalias sobre la Franja de Gaza, en su mayoría civiles, según los datos del Ministerio de Salud del gobierno de Hamás en Gaza, considerados confiables por la ONU.
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