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Washington/Londres.— En medio de la desesperación y las protestas, el mundo llegó ayer a los 100 millones de casos de Covid-19. Estados Unidos, India y Brasil son los países con más contagios, pero la situación se agrava en diversas naciones.
En tan sólo dos meses y 18 días se ha duplicado el número de casos, porque la cifra de los 50 millones se alcanzó el pasado 8 de noviembre, de acuerdo con el recuento de la Universidad Johns Hopkins.
Reino Unido se convirtió en el primer país europeo en superar los 100 mil decesos por la enfermedad. “Lamento profundamente a cada una de las vidas que se han perdido y asumo la responsabilidad completa por todo lo que ha hecho el gobierno” para abordar la crisis sanitaria, afirmó el primer ministro Boris Johnson en una rueda de prensa, en la que recalcó que la vacunación es la vía para “liberarse del virus”.
Al ser cuestionado sobre posibles errores en la lucha contra el Covid-19 por parte de su Ejecutivo, que a finales de abril del año pasado se marcaba como objetivo no superar los 20 mil muertos, el premier afirmó: “Realmente, hicimos todo lo que pudimos, y lo continuamos haciendo, para minimizar la pérdida de vidas”.
Mientras, crecen los cierres de fronteras y se refuerzan las medidas de confinamiento.
España anunció que los viajeros mexicanos deberán presentar una prueba negativa de Covid-19 para ingresar al país europeo, una medida que ya exige a otras naciones de Latinoamérica.
“De conformidad con la normativa actualizada del Ministerio de Sanidad, se exigirá a los viajeros provenientes de México PCR para entrada en España desde las 00:00 horas del día 1 de febrero”, informó la embajada española en México.
Además, la gente en sitios como Países Bajos está saliendo cada vez más a la calle, ante una situación que califican de insostenible.
Al menos 33 personas fueron detenidas en reyertas en la ciudad neerlandesa de Róterdam durante la cuarta noche de disturbios entre agentes y jóvenes que convocaron protestas contra el toque de queda, aunque la policía subrayó que la calma protagonizó la noche de ayer.
La gran esperanza, las vacunas están lejos de llegar a todos lados. Incluso la canciller Angela Merkel abogó por una repartición “equitativa”, en momentos en que unos cuantos países acaparan las dosis.
También en Alemania, el gobierno se propone reducir “a casi cero” los vuelos internacionales y restringir al máximo los viajes no esenciales al país, afirmó el ministro de Interior, Horst Seehofer, en declaraciones al diario Bild.
Pese a que se ha logrado reducir la incidencia de contagios, la canciller y los líderes regionales acordaron la semana pasada prolongar hasta el 14 de febrero las restricciones actuales, sobre todo por la expansión de las nuevas mutaciones británica, sudafricana y brasileña, que ya han sido detectadas tanto en Alemania como en otros países europeos.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) alertó que está también lejos el objetivo de vacunar a todo el personal sanitario y los adultos mayores en los primeros 100 días de 2021.
En contraste, se informó que unos 280 millones de dosis de vacunas llegarán a América Latina este año a través del programa Covac, la iniciativa internacional para llevar esta masiva campaña de inmunización a los países.
En otra colaboración, Sanofi dijo que ayudará a Pfizer y BioNTech a envasar su vacuna y debería condicionar más de 100 millones de dosis destinadas a la Unión Europea de aquí a finales de 2021, dijo el director general del laboratorio francés, Paul Hudson, al diario Le Figaro.
En Estados Unidos, que ayer sumó 4 mil 206 muertes para un total de 425 mil 36 fallecidos, el gobierno dijo que comprará 200 millones de dosis adicionales y tendrá suficiente para inocular a 300 millones de personas para el final del verano boreal. Una mitad se adquirirá a Pfizer y los otros 100 millones a Moderna, las dos que han sido aprobadas por las autoridades sanitarias.
El presidente Joe Biden subrayó que con esta compra EU aumentará en 50 %, de 400 millones a 600 millones, el número de dosis de las vacunas en su poder. “Estas son vacunas suficientes para vacunar a los 300 millones de estadounidenses para finales del verano, comienzos del otoño”, indicó Biden, porque tanto el suero de Pfizer como el de Moderna requieren de la administración de dos dosis.
