Estados Unidos está muy próximo al cierre de sus comicios electorales del próximo 3 de noviembre.
Los estadounidenses elegirán a su próximo presidente al igual que a los congresistas y senadores que los representarán a partir de enero de 2021. Los demócratas y los republicanos se disputarán 35 puestos en el Senado y 435 puestos en la Cámara de Representantes. Además, 11 estados elegirán nuevos gobernadores .
Dada la importancia de las próximas elecciones, es de esperarse que los políticos desarrollen distintas estrategias para obtener la mayor cantidad de votos y con 32 millones de personas de origen latino que tienen derecho a votar en estas elecciones en Estados Unidos, era de esperarse que las campañas se enfocaran en este grupo.
De acuerdo con el Diccionario de la Real Academia Española (RAE) , un hispano es una persona de origen hispanoamericano que vive en Estados Unidos. Por otra parte, el término latino se refiere a las personas que pertenecen a alguno de los pueblos que hablan lenguas derivadas del latín.
A pesar de que ambas palabras no son sinónimos, es común que en Estados Unidos se empleen como si lo fueran para referirse a la población cuyo origen viene de países de América Latina (sin contar a Brasil dado que su idioma oficial es el portugués), España y otros países hispanohablantes. La Oficina del Censo de Estados Unidos y el Pew Research Center son ejemplos de organismos que ocupan estos términos sin distinción.
No obstante, no hay que dejarse llevar por el uso indistinto de hispano y latino pues no se trata de un grupo uniforme , como podría llegar a parecer. Existe una amplia diversidad entre los hispanos o latinos y aunque comparten ciertos puntos de vista, no todos piensan igual, como afirma Mike López del Pew Research Center.
En 2018, la población hispana en Estados Unidos de origen mexicano era de 36,964,000 seguida por los puertorriqueños con 5,772,000 y los cubanos con 2,362,000. Los salvadoreños , dominicanos , guatemaltecos , colombianos y hondureños también tienen una población significativa en aquel país.
Como menciona José Rúas Araújo de la Facultad de Ciencias Sociales y de la Comunicación de la Universidad de Vigo en el artículo “ La creciente importancia del voto latino en las elecciones presidenciales de los Estados Unidos de América ”, las estimaciones del voto hispano hechas por la Oficina del Censo y otros organismos gubernamentales han mostrado un incremento exponencial que supera lo esperado.
Desde el censo del año 2000, se registró que los hispanos o latinos se habían convertido en la minoría más numerosa de Estados Unidos con un total de 35.3 millones de personas, es decir, 12% de la población total de ese país.
Para 2019 , la población hispana en Estados Unidos ya había alcanzado los 60.6 millones de personas , de acuerdo con el Pew Research Center, es decir, 18% de la población total de aquel país.
Además, cuatro de cada cinco latinos son ciudadanos estadounidenses . Como señala el think tank apartidista con sede en Washington D.C., para 2018, el 80% de los latinos viviendo en Estados Unidos contaban con la ciudadanía; esto incluye a la gente nacida en los Estados Unidos y sus territorios, gente nacida en el extranjero de padres estadounidenses, así como inmigrantes naturalizados.
Ligado a este crecimiento, el Pew Research Center señala que 32 millones de latinos son votantes elegibles para el proceso electoral de Estados Unidos del próximo 3 de noviembre. Con poco más del 13% de votantes elegibles, ésta será la primera vez que los hispanos sean la minoría racial y étnica más grande dentro del electorado.
Ciertamente, estas cifras tienen influencia en las campañas políticas rumbo a las elecciones de noviembre, aunque no es la primera vez que se compite por el voto migrante .
Rúas Araújo refiere que hay registros del interés en el voto migrante desde 1800 con la llegada de irlandeses a Nueva York, así como de judíos e italianos en 1930 .
Hablando específicamente de los latinos , este grupo ha recibido más atención desde mediados del siglo XX . Desde entonces, las elecciones presidenciales en Estados Unidos han desarrollado estrategias enfocadas en esta minoría. En el siglo XXI, esta tendencia se puede ver claramente reflejada en internet con dominios en español y versiones bilingües de sitios web.
Aunado a esto, también se han creado diversas organizaciones y campañas para fomentar el voto de la población hispana en Estados Unidos en distintos procesos electorales, como refiere Rúas Araújo, lo que demuestra que el interés en el voto latino crece a la par de este grupo demográfico pues su voto ha resultado decisivo en las elecciones desde finales de los años 9 0.
Si bien el gran número de latinos en Estados Unidos sugiere que esta minoría puede tener gran injerencia en la vida política de aquel país, los latinos han tenido poca participación en elecciones previas, ya sea porque no se registran para ejercer su derecho al voto o porque no se presentan a las urnas, razón por la que han sido apodados “ el gigante dormido ”. Con suerte, el 2020 será la excepción y Estados Unidos verá despertar a esta minoría cuyo voto puede tener un impacto decisivo en estas elecciones.
mp