El príncipe Harry rechazó una oferta para pasar el aniversario de la muerte de Isabel II en Balmoral con su padre, según The Sun. El duque de Sussex, que estaba dispuesto a volar más de 5 mil millas (8046.72 km) desde Estados Unidos, despreció el viaje relativamente corto a Balmoral, indica el medio.
El desaire ocurrió después de que solicitara formalmente a la oficina del rey alojamiento real y seguridad para su escala de una noche a principios de este mes, de acuerdo con The Sun. El medio afirma además que un asistente de alto nivel le dijo al príncipe que ninguna de las casas de la familia real en Londres y Windsor estaba disponible ya que la mayoría del personal estaba en Escocia con el rey y la reina Camila.
Harry ya estaba en el Reino Unido para asistir a los premios anuales WellChild y rechazó la rama de olivo y, en cambio, pasó la mañana del 8 de septiembre sólo antes de volar a Alemania para los Invictus Games.
A Harry le dijeron que podía unirse en Balmoral, donde Carlos y la reina Camila estaban pasando un tiempo privado en familia. Habría reunido a Harry con su padre y su madrastra sólo por unas pocas horas, pero aun así habría sido el periodo más largo juntos desde el funeral de Isabel II.
Sin embargo, se entiende que Harry, que describió a Camilla como una “villana” en su libro Spare, afirmó que su itinerario hacía imposible el viaje, para sorpresa de los expertos reales.
El príncipe Harry fue visto saliendo de la Capilla de San Jorge en el Castillo de Windsor el 8 de septiembre, donde fue enterrada Isabel II.
Harry, que ahora reside con su familia en Montecito, California, debe solicitar permiso para permanecer en una propiedad real. Durante el verano, la mayoría están cerradas, funcionando con un equipo mínimo o abiertas a los turistas.
Después de 24 horas en Inglaterra, Harry voló a Alemania para otro evento y tres días después se le unió Meghan, de 42 años, en su primera aparición pública importante en un año. Mientras estaban allí, la pareja celebró el cumpleaños número 39 de Harry en un restaurante de Dusseldorf.
The Sun reveló a principios de este año que el rey estaba desalojando a Harry y Meghan de Frogmore Cottage, Windsor.
La propiedad fue un regalo de bodas de la reina en 2018 y se pensaba que seguiría siendo su base en el Reino Unido después de que se mudaran al extranjero. El espacio está actualmente vacío y Harry no tiene acceso.