¿Qué se obtiene cuando se mezcla una cerveza con una Pepsi-Cola, un gran vaso con varios licores en llamas y un huevo crudo?
Para empezar, un video viral, como fue el caso del chino Liu Shichao, quien se filmó tomándose la combinación de bebidas en ocho segundos.
Y ese no es su único video. En otro clip, se le ve fumando mientras enciende seis cócteles y se los traga todos, una publicación que este lunes contaba con más de 800.000 vistas en la red social.
En otro, Liu mezcla vodka, whisky, vino tinto, cerveza, y, por supuesto, un huevo, y se bebe el cocktail como si fuera agua. Este tiene un poco más de 500.000 vistas.
Pero, ¿quién es Liu Shichao? ¿Qué daño le está haciendo a su cuerpo? Y, sobre todo, ¿qué nos dicen sus videos que se han vuelto virales sobre la sed de alcohol en la China moderna?
Liu filmó su primer video, donde se tomaba siete botellas de cerveza en 50 segundos, hace tres años.
"Un día vi un video de personas bebiendo cerveza", le dice a la BBC desde China. "Y pensé, yo también puedo hacer eso".
China tiene una enorme cultura de "celebridades digitales", que van desde blogueros de viajes hasta "chefs de oficinas". Este movimiento incitó a Liu a publicar en Kuaishou, un sitio chino para compartir videos.
"Mis videos eran cortos porque Kuaishou solamente me permitía cargar videos de un minuto", explica. "Necesitábamos beber muy rápido para terminarlos dentro del límite de tiempo".
En su punto más alto, Liu llegó a tener 470 mil seguidores y recibía hasta 10 mil yuanes al mes (alrededor de US$1.400) en donaciones, pero Kuaishou decidió cerrar su cuenta debido a que contenía comportamientos dañinos para la salud.
No obstante, en agosto, uno de sus videos, publicado en Kuaishou anteriormente, se compartió en Twitter y Liu se volvió viral fuera de China por primera vez.
"La gente empezó a decirme que era popular en Twitter", afirma. "Y yo respondía: '¿Qué es Twitter?'. No tenía idea".
Liu tiene 33 años y vive en Hebei (una provincia cerca de Pekín) y se llama a sí mismo "campesino". No habla inglés y se sirve de un software de traducción para publicar en internet.
"Al principio, no conocía ninguna plataforma de red social", confiesa. "Soy de una zona rural".
Como muchos sitios occidentales, Twitter está bloqueado en China, por lo que sus videos se publicaron de forma remota. Liu ganó 60.000 seguidores en menos de seis semanas.
"Los fans extranjeros son muy apasionados y divertidos", dice. "Un hombre turco me pidió mi dirección para enviarme cerveza turca".
Sus videos todavía le generan dinero, pues sus publicaciones en Twitter están conectadas a su cuenta PayPal.
Pero no son (por ahora) su principal fuente de ingreso; Liu se gana la vida vendiendo carne por internet y también solía dirigir un restaurante.
La mayoría de sus seguidores son hombres: "Supongo que es porque también les encanta beber, tal vez haya un poco de celos".
Sin embargo, su esposa no comparte esa admiración.
"Ella está molesta y está preocupada por mi salud", dice. "A menudo discutimos por esto".
Liu insiste en que no es alcohólico. "Nunca bebo cuando estoy solo".
"Los alcohólicos de verdad del norte de China sí beberían solos".
También asegura que no siente efectos negativos después de grabar. "Puedo beber de verdad", dice, y sus videos no dejan ninguna duda sobre esta afirmación.
Sin embargo, el hombre de 33 años aconseja tener precaución. "Todos los videos están dentro del alcance de mi capacidad (de beber)", publicó esta semana, haciendo un llamado a los adolescentes para que no lo imiten.
Pero la doctora Sara Kayat, de Londres, explica que a pesar de su complexión de hierro, Liu corre el riesgo de desmayarse, vomitar e incluso asfixiarse.
Y también hay peligros a largo plazo.
"El consumo excesivo de alcohol puede provocar problemas de salud mental y problemas hepáticos, y también pueden ocasionar un aumento de la presión arterial, un ritmo cardíaco irregular e incluso algunos tipos de cáncer".
A medida que China se ha enriquecido, su apetito por el alcohol ha crecido.
Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), el 4% de la población china había tenido "borracheras" en los últimos 30 días en 2003. Para 2016, la cifra fue de 23%.
El aumento fue particularmente fuerte en los hombres: el 36% se consideraban bebedores compulsivos ese año, en comparación con el 7,5% en 2003.
El doctor Jason Jiang, un experto en políticas relacionadas con el alcohol de la Universidad La Trobe en Melbourne, ha escrito ampliamente sobre el fenómeno del alcohol en China y afirma que Liu es parte de una tendencia.
"Desde mi punto de vista, su comportamiento con el alcohol es demasiado peligroso (...). Y el problema es que muchos jóvenes adoran sus tuits, lo que es aún más problemático", afirma Jiang.
"He visto varias publicaciones online similares de otros jóvenes, quienes tienen ganas de mostrar sus habilidades especiales para tomar alcohol y estar orgullosos de eso", agrega.
"Aunque los efectos del consumo excesivo de alcohol en la salud (como cirrosis hepática y cáncer) pueden no verse a corto plazo, el abuso de alcohol aumenta los riesgos de otros daños relacionados con la bebida, como la violencia, las caídas y los accidentes de tráfico".
Pero Liu está disfrutando demasiado su momento de fama para dejar la cerveza... y el vino, el licor, los cigarrillos y los huevos.
"Muchas gracias por su amor y por su apoyo", publicó este mes.
"Soy una persona común en la China rural. Estoy muy feliz de conocerlos y haré todo lo posible para enviarles otros videos muy buenos pronto. Los amo".
Y luego, con el clic de un botón de reproducción, el chino mezcla cerveza, vino de arroz, licores, una lata de Red Bull y un huevo, y se baja todo en 8 segundos.
Cobertura adicional hecha por Ellen Jin