Estambul.— El atentado terrorista con bomba que causó ayer al menos seis muertos y 81 heridos, dos de ellos en estado grave en Turquía, desató una ola de solidaridad internacional.
“Por ahora tenemos un total de seis muertos, cuatro de ellos fallecidos en el mismo lugar de los hechos. Hay 81 heridos, de los que dos están en estado grave”, dijo el vicepresidente de Turquía, Fuat Oktay, en rueda de prensa.“Estamos evaluando que fue un ataque terrorista cometido por una mujer que hizo detonar una bomba”, agregó.
Poco antes, el presidente turco, el islamista conservador Recep Tayyip Erdogan, ya había anunciado que el incidente era con gran probabilidad un atentado terrorista. “Hay personas que han muerto en un atentado con bomba a las 16:20 horas (13:20 GMT) en Istiklal. Ofrezco mis condolencias a los familiares de los fallecidos y mis deseos de recuperación a los heridos. El Estado encontrará a los organizadores de este ataque terrorista”, dijo Erdogan en la cadena TRT. Horas más tarde, se informó de una persona detenida como responsable de lo ocurrido. Los datos preliminares sugieren que el grupo terrorista Partido de los Trabajadores del Kurdistán/Unidades de Protección Popular (PKK/YPG) está detrás del atentado.
“Nos entristece profundamente la pérdida de vidas que ocasionó la explosión en Estambul. Extendemos nuestras sinceras condolencias a las familias de las víctimas y al pueblo turco. Estados Unidos está unido con nuestros aliados turcos”, dijo el secretario de Estado, Antony Blinken.
El presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, también expresó sus condolencias: “Nuestros pensamientos están con el pueblo de Turquía y con las familias de las víctimas del atentado”, dijo.
El secretario general de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), Jens Stoltenberg, externó igualmente su solidaridad y condolencias.
En América Latina, los gobiernos de El Salvador, Panamá y Venezuela calificaron de “lamentable” el ataque y se sumaron al duelo en Turquía.
La calle Istiklal, una avenida peatonal llena de comercios, que arranca en la emblemática plaza de Taksim, está a todas horas llena de transeúntes, entre ellos muchos turistas.
La autoridad de radiotelevisión turca ha decretado una “prohibición temporal” de emitir imágenes del lugar de los hechos y de dar información sobre posibles sospechosos, exceptuando declaraciones de autoridades, para no entorpecer la investigación en curso.
Un partido de futbol que iba a tener lugar entre el Besiktas y el Antalyaspor, en el estadio titular del primero, situado a sólo 700 metros de Taksim, fue aplazado, informó la Federación del Futbol Turca en su web.
Sin embargo, tanto las líneas de tranvía como las de Metro en la zona de Taksim y los barrios adyacentes funcionaron con normalidad después del ataque, informaron residentes de la zona.
En 2016 hubo varios atentados terroristas en Turquía, la mayoría de redes del grupo yihadista Estado Islámico, en Estambul, uno de ellos en la propia calle Istiklal.
Sin embargo, tras la masacre causada por un yihadista en la noche vieja de aquel año en una discoteca a orillas del Bósforo, no hubo más atentados en la ciudad.
Cierran zona por temor a otro ataque
La policía acordonó el lugar para evitar que se acercaran personas y por temor a una segunda explosión. Un imponente despliegue de las fuerzas de seguridad bloqueó también el acceso al barrio y a las calles aledañas.
“Estaba a unos 50-55 metros de distancia, de repente hubo un ruido de explosión. Vi a tres o cuatro personas en el suelo”, declaró un testigo, Cemal Denizci, de 57 años. La explosión, que desató el pánico, dejó un gran cráter negro y varios cuerpos en el suelo.
Suscríbete aquí para recibir directo en tu correo nuestras newsletters sobre noticias del día, opinión, Qatar 2022 y muchas opciones más.