Washington.— El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dijo ayer que su propuesta de acuerdo de inmigración para poner fin al cierre parcial del gobierno que lleva 31 días no implicaría una amnistía para los dreamers, pero pareció dar señales de que la apoyaría como parte de un acuerdo de inmigración más amplio.
En declaraciones vía Twitter, Trump mencionó que no buscará la remoción de millones de extranjeros que viven en Estados Unidos de forma ilegal, mientras atacaba a la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, y a los demócratas por rechazar su oferta el sábado.
“No, amnistía no es parte de mi oferta. Es una extensión de tres años del DACA. La amnistía se usará sólo en un acuerdo mucho más grande, ya sea en inmigración o algo más”, dijo el mandatario.
El caso del programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA por sus siglas en inglés) se encuentra en manos del Tribunal Supremo, de mayoría conservadora, el cual debe decidir sobre el futuro de 700 mil dreamers, como se conoce a los beneficiarios del programa creado en 2012 por el ex presidente Barack Obama y que regulariza, de manera temporal, a los jóvenes indocumentados que llegaron de la mano de sus padres a Estados Unidos.
“Del mismo modo, no habrá un gran esfuerzo para sacar a las más de 11 millones de personas que están aquí ilegalmente, ¡pero ten cuidado Nancy!”, añadió el presidente.
Antes de que Trump hiciera su anuncio ayer, Pelosi emitió un comunicado en el que calificó su iniciativa de “no arranque”.
“Nancy Pelosi y algunos de los demócratas rechazaron mi oferta antes de que incluso yo hablara. No ven el crimen y las drogas, sólo ven 2020 [cuando están previstas las próximas elecciones presidenciales] que ellos no van a ganar”, tuiteó, y dijo que “deberían hacer lo correcto por el país y permitir a la gente regresar al trabajo”.
El sábado, el mandatario pronunció un discurso en la Casa Blanca en el que ofreció a los demócratas extender dos protecciones migratorias canceladas por él mismo, el programa de DACA y el Estatus de Protección Temporal (TPS), a cambio de financiación para un muro en la frontera con México.
La disputa entre Trump y los demócratas por los fondos para el muro ha ocasionado el cierre parcial de la administración gubernamental, que hoy cumple 31 días.
El vicepresidente Mike Pence calificó de “decepcionante” que los demócratas hayan rechazado la propuesta de Trump. Aun así, se manifestó optimista de que el plan será bien recibido por el Senado, donde el líder de los republicanos, Mitch McConnell, anunció que esta semana tomará a consideración la propuesta del presidente Donald Trump para poner fin al cierre parcial del gobierno.
McConnell planea presentar una legislación para reabrir el gobierno, la cual incluye la propuesta del presidente estadounidense para ofrecer protección temporal a algunos inmigrantes a cambio de más de 5 millones de dólares para el muro.
Denuncian uso de niños migrantes como “disuasorio”. El senador demócrata Jeff Merkley denunció ayer que para abordar la llegada de inmigrantes a Estados Unidos el gobierno de Trump adoptó como estrategia “lastimar a los niños [migrantes] como herramienta disuasoria”.
“Eso es una estrategia política”, declaró en una entrevista concedida a la cadena MSNBC, en la que aludió a un memorándum interno federal en el que figura la separación de familias migrantes como parte de las formas para abordar la inmigración ilegal.
Merkley, senador por Oregón, pidió al director del FBI, Christopher Wray, que inicie una investigación por posible perjurio contra la secretaria de Seguridad Nacional, Kirstjen Nielsen, a la luz del documento.
El senador señaló que el pasado diciembre Nielsen mintió en un testimonio jurado que dio al Congreso y en la que la funcionaria dijo: “Nunca hemos tenido una política para la separación familiar”.
En tanto, una portavoz del Departamento de Seguridad Nacional señaló que Nielsen siempre ha rechazado que se separen familias migrantes bajo custodia de la Administración federal.