BATON ROUGE, Luisiana
.- El problema de las dosis anti-Covid desperdiciadas en Luisiana continúa aumentando, con alrededor de 224 mil dosis descartadas en todo el estado, porque los proveedores de salud no pueden encontrar suficientes residentes dispuestos a inyectarse.
La cantidad de vacunas desechadas casi se ha triplicado desde finales de julio, incluso cuando el área lidiaba con un cuarto aumento mortal de la pandemia de coronavirus durante ese tiempo que llevó a un mayor interés en las sustancias.
Los últimos datos proporcionados por el Departamento de Salud mostraron que se descartaron 223 mil 918 dosis de las vacunas Pfizer y Moderna de dos inyecciones y la vacuna Johnson & Johnson de una sola inyección.
Eso es relativamente pequeño en comparación con los 4.4 millones de dosis administradas en todo el estado. Pero si bien el desperdicio no es infrecuente en los esfuerzos de inmunización masiva, el desecho en Estados Unidos se produce cuando millones de personas en todo el mundo todavía esperan la oportunidad de vacunarse.
La mayoría de las dosis desperdiciadas en Luisiana se produjeron porque se abrieron los viales que contenían las inyecciones, pero los hospitales, clínicas, farmacias y otros proveedores no pudieron encontrar a alguien que tomara las dosis, dijo el portavoz del departamento de salud Kevin Litten.
Más de 21 mil 500 inyecciones simplemente no se usaron antes de su fecha de vencimiento.
Otras casi 50 mil dosis de las vacunas Moderna y Johnson & Johnson expirarán el próximo mes, pero Litten dijo que el estado espera distribuir esas vacunas antes de eso.
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Luisiana tiene una de las tasas de vacunación Covid-19 más bajas del país, según datos de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EU, que muestran que sólo cinco estados tienen tasas de vacunación más bajas.
Más de 2.1 millones de personas en el lugar, aproximadamente 46% de la población, están completamente vacunadas, informa el Departamento de Salud.
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