Kiev/Washington.— El lunes los gobernantes del mundo se divideron entre quienes apelaron al concepto de genocidio, practicado por Rusia en Ucrania, y quienes se abstuvieron de calificar los actos de guerra en dicha magnitud.
Luego de que las tropas rusas intensificaran la ofensiva en la ciudad clave de Mariupol, donde han muerto 20 mil personas, y donde, según las autoridades ucranianas, se han encontrado más de 13 crematorios móviles, los gobernantes de Estados Unidos, Canadá, Colombia se pronunciaron por tal definición.
Joe Biden no tardó en tachar a su homólogo de Rusia, Vladimir Putin, de criminal de guerra y carnicero que no debería permanecer en el poder, además de culparlo de cometer “genocidio”.
La declaración se dio tras su visita a Iowa, donde habló de la inflación y combustibles, y donde la prensa le preguntó: “¿Cree que Putin comete genocidio en Ucrania?”. A lo que respondió: “El presupuesto de tu familia, tu capacidad para llenar el depósito, nada de eso debería depender de que un dictador declare la guerra y cometa genocidio al otro lado del mundo” .
El premier canadiense, Justin Trudeau, se unió a Biden y dijo que es “correcto” describir los ataques de Rusia en Ucrania como genocidio. “Hemos visto este deseo de atacar a los civiles, de usar la violencia sexual como arma de guerra”, dijo en Quebec. “Esto es completamente inaceptable”. El presidente colombiano Iván Duque hizo lo propio. En un mensaje a la diplomacia ucraniana, sostuvo: “Le expresamos toda nuestra solidaridad y respaldo a su pueblo, que, con profunda tristeza, clama porque este genocidio termine”.
Pero el presidente francés, Emmanuel Macron, y el canciller alemán, Olaf Scholz, no emplearon el término usado por Biden. Macron advirtió que la escalada verbal no ayuda a terminar la guerra y pidió prudencia.El canciller alemán compartió el mismo punto de vista y habló de “crímenes de guerra”.
Rusia rechazó los dichos de Biden, al considerar “inaceptables los intentos de distorsionar la situación”, dijo el vocero de la presidencia Dmitri Peskov.
Aparte, Biden anunció un nuevo envío de armamento a Ucrania, que incluye vehículos blindados y helicópteros. Tras una llamada con su par ucraniano, Volodimir Zelensky, dijo que las nuevas entregas de armas comprenden equipos “eficaces que ya hemos entregado” a Ucrania, pero también “nuevas capacidades”, entre las que destacan “sistemas de artillería y medios de transporte blindados”, precisó el gobierno.
En este contexto, los presidentes de Polonia, Andrzej Duda; de Estonia, Alar Karis; Lituania, Gitanas Nauseda, y Letonia, Egils Levits, visitaron zonas destruidas por las tropas rusas en la región de Kiev, en un viaje de solidaridad con Ucrania.
En tanto, la OTAN avanzó con Finlandia y Suecia hacia una futura adhesión. Los finlandeses entregaron su informe de seguridad y Suecia inició con una revisión de política.