Desde el 2004, cada 21 de julio se celebra el Día Mundial del Perro , con el objetivo de generar conciencia sobre la cantidad de perros sin hogar que hay en todo el mundo y de la importancia de adoptar a un animal tan querido y particular.
Si bien no existe demasiada información sobre la elección del 21 de julio para celebrar esta jornada puntual, desde el 2004 este día tiene un valor especial y se suma al calendario, al igual que otras fechas de características similares, como es el caso del Día Nacional del Perro que se celebra cada 2 de junio en la Argentina.
En definitiva, la compañía de un perro es una de las cosas más maravillosas que puede disfrutar un ser humano y es preciso conmemorar la fecha remarcando los principales problemas que sufren los animales y la manera en que las acciones de las personas pueden afectar directamente en su calidad de vida.
Día Mundial del Perro: el número mundial y el porcentaje que vive en la calle
Se estima que, actualmente, existen unos 300 millones de perros en todo el planeta. De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud ( OMS ), el 70% de los perros no tiene hogar. En este sentido, el Día Mundial del Perro se presenta como una excelente oportunidad para incentivar la adopción y garantizarles el cuidado y atención necesarios.
Por otra parte, la adopción desalienta la compra de perros de raza y, por consiguiente, ayuda a combatir los malos tratos que reciben estos animales en los criaderos.
Los beneficios de tener un perro
El amor incondicional y la fidelidad de su compañía, tener un perro aporta una gran cantidad de beneficios extra para la salud de los seres humanos.
Entre ellos se destacan las virtudes que los perros aportan a la salud mental y emocional de las personas, sobre todo al evitar la sensación de soledad y al estimular las habilidades de comunicación no verbal.
Además, quienes tienen un perro saben que es necesario sacarlo a pasear, lo que ayuda a llevar una vida más activa en el plano físico.
A su vez, existen numerosos estudios científicos que dan prueba de lo positivo que resultan los perros como acompañantes terapéuticos, ya sea por asistencia o apoyo emocional.
agv