Una investigación del Ministerio de Defensa argentino alertó sobre supuestas irregularidades en la compra directa de las baterías del submarino ARA San Juan, que desapareció el 15 de noviembre con 44 tripulantes en el Atlántico Sur, informó ayer el periódico La Nación. Mientras que las autoridades de ese país hacen lo posible para hallar la nave y no descartan una situación de “supervivencia extrema”, luego de que en la semana dijeran que quienes iban a bordo podrían haber muerto.
El último día de contacto con la base, el comandante del submarino reportó una “falla eléctrica en el compartimiento de baterías de proa en la madrugada del miércoles”, confirmó la Armada. Según reveló la fuerza el sábado, 10 días después de la desaparición, la avería fue subsanada y el submarino “tenía propulsión con el circuito eléctrico de popa”.
Un informe de un organismo internacional reveló, con base en sonidos captados por estaciones hidrófonas, que pocas horas después de la última comunicación del submarino, el 15 de noviembre, se registró en la zona donde navegaba “un evento violento consistente con una explosión”.
El ARA San Juan fue construido por la empresa alemana Thyssen, con propulsión diésel-eléctrica, y cuenta con 960 baterías. Entró en servicio en 1985, pero entre 2008 y 2014 se le realizó una reparación de media vida para prolongar sus años de uso.
El informe secreto del Ministerio de Defensa fue realizado por expertos entre 2015 y 2016 y determinó que la Armada habría incumplido los estándares normativos y operativos para la reparación de media vida y el recambio de baterías, que se buscó direccionar la compra de suministros para beneficiar a ciertos proveedores y que, en ese proceso se habrían adquirido insumos con garantías vencidas y cometido delitos, destacó La Nación.
Una auditoría de la Sindicatura General de la Nación (Sigen) señaló que hubo desvíos en los planes trazados para la ejecución material y presupuestaria de la obra, con demoras de hasta cuatro años, lo que permitió, “en el caso de las baterías, la pérdida del periodo de garantía”.
En tanto, un total de 14 buques y tres aeronaves de 13 países participan en el operativo de búsqueda del submarino en la zona.
“Hasta tanto no tengamos indicios o certezas de la situación del submarino, no podemos hablar de algo que alguien opine”, declaró Enrique Balbi, portavoz de la Marina, luego de que la diputada Elisa Carrió afirmó que los tripulantes “están muertos”.
“Tratamos de ser respetuosos con los familiares. Si bien van 11 días de búsqueda, esto no quita que puedan estar en una situación de supervivencia extrema”, dijo.